Contado por Clove:
Avanzo rápidamente en dirección a la Cornucopia.
Me escondo tras unos matorrales a esperar que amanezca. No creo que la Chica en Llamas se pase aquí, seguramente creerá que Cato también ha venido, y supongo que es lo suficientemente inteligente como para no enfrentarse a él, hay veces en las que incluso a mí me da miedo.
Cato es bastante raro, no por ser feo, sino por sus reacciones, ese chico más que hablar grita y no hablemos luego de sus rabietas... Aunque me cae muy bien, pienso que está completamente loco.
Creo que está obsesionado conmigo, siempre está protegiéndome de todo y preocupado por lo que me pueda suceder, aparte se pasa la mitad del tiempo sonrojado y pegado a mí, de esos ya hay varios en mi Distrito, son verdaderamente pesados. Pero Cato es distinto a ellos, no es tan molesto, me agrada que se preocupe por mi y me proteja, me siento más segura a su lado, también ha sido muy bonito el detalle de que no quisiera que me ocurriese nada.
Tal vez le de una oportunidad de salir conmigo después de los Juegos.
Comienza a amanecer, me tomo un pequeño instante para observar el grandioso sol que asciende y saco un cuchillo de la chaqueta.
Decido esperar a que la Chica en Llamas salga, así me ahorro el esfuerzo de buscarla. Me quito las gafas de visión nocturna y espero.
Veo a la chica del 5 corriendo para llevarse su mochila.
Pero ella no es mi objetivo.
La del 5 sale de la Cornucopia, esa chica me recuerda a las comadrejas con esa cara tan extraña.
Veo a la Chica en Llamas avanzando y salgo tras ella a toda velocidad, apuntando con el cuchillo a su cabeza. Lo lanzo.
Desvia el cuchillo con el arco, pero no voy a darme por vencida.
Ella tensa el arco y dispara una flecha directa a mi corazón, me vuelvo lo justo para evitar el blanco mortal, pero me atraviesa el brazo izquierdo ¡Ay! Menos mal que soy diestra.
Saco la flecha con una mueca de dolor y veo la herida, es bastante profunda, pero no creo que me desangre.
Ella sigue abanzando y coloca una flecha. Recoje su mochila y se la coloca en el brazo, es el momento perfecto para atacar.
Se vuelve para dispararme (No he visto chica más tonta en mi vida, deberia haberme disparado cuando me examinaba la herida, no ahora) pero yo ya me he preparado.
La lanzo un cuchillo que la da en la frente, la hago un corte sobre la ceja y comienza a tambalearse para retroceder. Lanza la flecha sin siquiera apuntar hacia mí, como si alguna especie de magia fuese a hacer que la flecha me diese en la cabeza.
Me abalanzo sobre ella y la derribo fácilmente como a un maniquí. La sujeto los hombros contra el suelo con las rodillas.
Voy a saborear el momento de matarla, tengo tiempo de sobra, Cato estará protegiéndome y seguramente esperando al chico del 11 y al Enamorado.
- ¿Dónde está tu novio, Distrito 12? ¿Sigue vivo?- La pregunto en tono amenazante.
- Está aquí al lado, cazando a Cato- Está de coña, que el Enamorado pueda matar a Cato no se lo cree ni ella- ¡Peeta!- Grita a todo pulmón ''Imbécil'' Pienso.
La doy un puñetazo en la tráquea y se calla. Por si acaso muevo la cabeza para ver si viene, no tengo suficientes manos como para matar a dos.
- Mentirosa- Digo sonriendo- Está casi muerto, Cato sabe bien dónde cortó- Aseguro, más le vale a Cato saber dónde le dio- Seguramente lo tienes atado a la rama de un árbol mientras intentas que no se le pare el corazón ¿Qué hay en esa mochilita tan mona?- Pregunto quitándosela del brazo- ¿La medicina para tu Chico Amoroso? Que pena que no la vaya a ver- Tiro su mochila al suelo y abro mi chaqueta. Selecciono un cuchillo amenazante con una cruel hoja curva- Le prometí a Cato que, si me dejaba acabar contigo, le daría a la audiencia un buen espectáculo- Añado, tengo que buscar alguna forma que no me de nauseas al matarla. Ella se retuerce para desequilibrarme pero no lo consigue, soy más grande que ella y no puede soltarse de mi llave- Olvídalo, Distrito 12, vamos a matarte, igual que tu lamentable aliada... ¿Cómo se llamaba? ¿La que iba saltando por los árboles? ¿Rue?- Pregunto, no tengo nada en contra de la niña, me parece adorable, pero eso parece molestarla, así que voy a seguir con ese tema- Bueno, primero Rue, después tú y después creo que dejaremos que la naturaleza se encargue del Chico Amoroso ¿Qué te parece? Bien ¿Por dónde empiezo?
La limpio con la manga de la chaqueta la sangre de la herida sin mucha delicadeza, no voy a ponerme perfeccionista solo por que ella se queje. La observo la cara durante un momento, tiene cara de niña pequeña. Intenta moderme la mano, pero la agarro del pelo de la parte de arriba de la cabeza y la obligo a apoyarla en el suelo.
- Creo...- Digo entusiasmada de poder deshacerme de ella- Creo que empezaré con tu boca.
Trazo burlona el perfil de los labios con la punta del cuchillo, parece indignada con el comentario de Rue, me hace gracia la cara que pone.
- Sí, creo que no te hacen mucha falta los labios ¿Quieres mandarle un último beso a tu Chico Amoroso?- Pregunto en tono burlón. Me ecupe sangre en toda la cara ¡Será imbécil! Me pongo roja de rabia- De acuerdo, vamos a empezar.
Comienzo a cortarla los labios y ella comienza a gritar como un niño.
- ¡Para, porfavor!- Grita suplicante, la corto la mitad de la boca y ella comienza a llorar, me doy cuenta de que tiene un oído sangrando.
- ¿Qué te ha pasado en la oreja?- Digo burlándome de ella
- Me hice esto cuando estallé vuestras provisiones- Dice ¡¿Que ha hecho qué?! Cuando Cato se entere de esto seguramente se pondrá a arrancarse los pelos de la cabeza.
Ya estoy hasta las narices, saco el cuchillo y la corto la oreja, ella chilla y patalea, yo agito su oído en la mano, resulta asqueroso, pero ha merecido la pena, está sufriendo.
Comienzo a hacerle la forma de las cejas y sigue gritando a todo pulmón, la cierro la boca porque con tanto chillido voy a acabar quedándome sorda.
- Peeta...- Llora la Chica en Llamas, mira que la puedo ahogar y ella sigue hablando.
Creo que ya ha sufrido bastante.
La clavo el cuchillo en el pecho y suena su cañonazo.
Al fin ha muerto.
Entonces una fuerza terrible me levanta, grito y veo al enorme chico del 11. Me tira al suelo.
- ¿Qué la has hecho a la niñita? ¿La has matado?- Me pregunta gritando, me sorprende como puede alzar la voz tanto.
- ¡No! ¡No fui yo!- Grito asustada, él frunce el ceño, ya recuerdo su nombre, Tresh.
- Has dicho su nombre, te he oido ¿La has matado?- Alza aún más la voz- ¿La cortaste en trocitos como a esta chica?
- ¡No! No, yo no...- Grito asustada.
Tresh alza hacia mí una enorme roca y retrocedo de rodillas.
Grito el nombre de Cato justo cuando la roca me golpea en la cabeza.
viernes, 29 de marzo de 2013
sábado, 23 de marzo de 2013
18.
Ya han pasado más de dos días y ni rastro de los Amantes Trágicos, me estoy hartando de ellos.
Llevo sin desayunar mucho tiempo y me está entrando hambre, me parece que no soy lo suficientemente atractivo para que los patrocinadores me envíen algo de comer ¡PERO CLOVE SÍ! ¡QUE LA LANCEN ALGO!
- ¿Aquí no nos lanzan nada?- Pregunta Clove, también ella se ha dado cuenta de que no nos mandan nada.
- ¡Eh, Brutus! ¡Si no te estas enrollando con Enobaria, lanzarnos algo!- Grito.
Automáticamente cae un enorme paracaídas que me acierta en la cabeza. ¡Ay!
Creo que eso era signo de venganza.
El paracaídas está lleno de comida: Hay carne... Pescado... Cereales y galletas...Fruta... Leche y agua... Todo menos una almohada. Quiero hablar con la almohada sobre Clove, porque no voy a hablar de Clove con Clove, sería ridículo, pero como no se han percatado de que existo me quedo sin almohada.
Hay una nota dentro del paracaídas; es de Brutus porque la letra lo delata y seguramente este dirigida a mí, que soy el único que logra entender esos símbolos. En el papel pone ''CATO, COMO VUELVAS A MENCIONAR EL TEMA DE ENOBARIA Y YO EN LOS JUEGOS ME ENCARGARÉ DE QUE TE MATEN DE LA PEOR MANERA POSIBLE'' Mierda, me va a matar.
Clove saca un paquete de galletas y comienza a comer, se la veía muerta de ganas por comer algo, yo estoy por robarla el paquete de galletas y comérmelas todas de golpe, pero mejor no, me niego a hacer el ridículo delante de Clove, que me vea el Capitolio me da igual, pero si me ve ella muero de vergüenza.
- ¿Quieres?- Pregunta Clove pasándome el paquete de galletas, saco una cuantas y comienzo a comer como un loco COMIDAAAA.
-¡Eh! ¡No te comas todas las galletas de golpe que yo también quiero comer!- Grita apartando el paquete de galletas, ya estaba dispuesto a quitarla más, sigo con hambre.
- Pero tengo hambre ¡Quiero galletas!- Digo quejándome e intentando quitarla el paquete de galletas de las manos, inclinándome y agitando los brazos.
Me caigo encima suya y ella me da un empujón, yo la agarro por las cintura y la giro, ahora ella esta encima mía.
Me vuelve a empujar, esta vez más flojo. Yo la empujo hacia un lado y al caer rueda. Me acerco a ella, se está riendo, me empiezo reír también y me empuja, caigo al Lago, rodando. Clove se incorpora y se acerca a la orilla. Se agacha riéndose de mí, la agarro por el tobillo y la tiro al agua.
Se levanta y me empieza a salpicar, yo también la salpico. Nos pasamos así un buen rato. Una de las veces la empujo y se cae. Como veo que al rato no sale me acerco preocupado.
Clove sale y me hace una ahogadilla. Comienzo a ahogarme, pero al cabo de un rato me suelta y nos ponemos a salpicarnos de nuevo.
Nunca me había divertido tanto ¿Esto lo que se siente cuando tienes un amigo? Como mola, ojalá hubiera tenido amigos antes...
Salimos del agua riendo, completamente empapados, bueno, al menos ya no me hace falta bañarme para lo que quedan de Juegos. Nos sentamos en un lado donde hace sol para secarnos.
-Te has quedado sin galletas, ahora están en el agua gracias a tu ''super inteligencia''- Dice, no sé si reírme o sentirme ofendido- Y como que no pienso bucear para buscar nada, seguro que ya están casi deshechas.
- Bueno, ya da igual, se me ha quitado el hambre- Comento, tanta risa me ha quitado el apetito.
Clove se lleva la palma de la mano a la frente, nos hemos estado peleando por un paquete de galletas y ahora resulta que no tengo hambre. Definitivamente soy desesperante.
Me quito la chaqueta y comienzo a escurrirla con las manos, a ver si se seca, parezco tonto, espero que Clove no me tome por imbécil. Ella se recuesta en un árbol para acomodarse y comienza a afilar un cuchillo.
Estoy planteándome eso de pedirla que sea mi novia, puede que tenga alguna posibilidad de que acepte, aunque sea mínima, pero seguramente sea un rechazo, porque no creo que la guste; soy un chico completamente feo y estoy como una cabra, pero podría ser, puede que la gusten esa clase de chicos, no estaría nada mal.
Me siento al lado de Clove, y disimuladamente estiro el brazo y se lo paso por los hombros. Greg suele hacer eso cuando intenta ligar, tal vez conmigo funcione. Aunque no quiero ser como Greg, es la única opción que tengo para llamar su atención.
Me decido a hablar con ella y pedirla que sea mi novia, puede que no sea la mejor opción, pero si no se lo digo acabaré explotando.
Cuando estoy a punto de hablar, el himno suena ¡PERO NO PUEDEN DEJARME TENER UN MOMENTO TRANQUILO CON ELLA, PARECE QUE LO HACEN A PROPÓSITO! ¡SEGURO QUE SI AHORA MISMO TUVIESE MI ALMOHADA NADA DE ESTO SUCEDERÍA!
- Atención, tributos- Suena la voz de Claudius con ese horrible acento- ¡Enhorabuena todos los supervivientes!- Nos felicita, muy considerado por su parte- Mañana al amanecer habrá un banquete ceremonial en la Cornucopia al que estáis invitados, en él encontraréis una mochila en la que habrá algo que necesitáis desesperadamente.
Desesperadamente.
¿Va a haber una almohada en la mochila? Porque eso lo necesito desesperadamente.
O una cara nueva un poco más atractiva que la actual tampoco estaría mal.
O incluso algún invento raro que haga que Clove se enamore perdidamente de mí, no estaría nada mal.
Clove se levanta y aparto el brazo.
- ¿Dónde vas?- Pregunto, observándola mientras guarda cosas en una mochila.
- A la Cornucopia- Responde- Voy a ir al banquete, sea lo que sea lo que hay en esa mochila, lo necesitamos desesperadamente.
- No pienso dejarte ir sola- Digo, pueden atacarla y no pienso dejarles que la hagan daño.
- ¿Por qué no? Voy a estar bien, no va a pasar nada- Dice, confío en ella, en lo que no me fío son de los demás.
- Podrían atacarte, mejor voy contigo- Contesto.
- Déjame ir solo por una vez, quiero ir a matar a la Chica en Llamas sola- Me pide sonriendo, mierda, está usando sus encantos para convencerme.
- Bueno...- CATO, NO CAIGAS EN SUS ENCANTOS ¡RESISTE!- Sigo sin estar muy seguro...
- Me encargaré de dar un buen espectáculo matándola- Añade, bueno, eso sí que me convence, así los patrocinadores nos mandarían cosas, pero sigo preocupado por lo que la podría pasar.
- Está bien- Digo con dificultad- ¿Pero qué pasará si te atacan?- La pregunto. Se queda pensativa un instante mientras guarda unas gafas de visión nocturna en la mochila.
- Pues gritaré tu nombre para que te enteres y vengas a ayudarme- Responde ¡Que bien! ¡Va a gritar mi nombre! Ah espera, que si lo grita la estará pasando algo malo.
Tengo que decirla algo antes de que se vaya a la Cornucopia, no pienso dejar que se vaya sin decirla lo que siento.
- Clove- Digo y ella se gira- No quiero que te hagan daño.
Se acerca a mí sonriendo y me da un beso en la frente. Me sonrojo completamente y me quedo boquiabierto.
-No te preocupes ¿Vale? Si te necesito, te llamo- Me dice y se vuelve a recoger su mochila.
Cierro la boca rápidamente porque me doy cuenta de que estoy babeando.
Oh Dios mío, Clove me ha besado, bueno, ha sido en la frente, pero no importa ¡Me ha besado!
Me decido decirla algo más, pero creo que voy a esperar.
Veo a Clove marcharse.
Llevo sin desayunar mucho tiempo y me está entrando hambre, me parece que no soy lo suficientemente atractivo para que los patrocinadores me envíen algo de comer ¡PERO CLOVE SÍ! ¡QUE LA LANCEN ALGO!
- ¿Aquí no nos lanzan nada?- Pregunta Clove, también ella se ha dado cuenta de que no nos mandan nada.
- ¡Eh, Brutus! ¡Si no te estas enrollando con Enobaria, lanzarnos algo!- Grito.
Automáticamente cae un enorme paracaídas que me acierta en la cabeza. ¡Ay!
Creo que eso era signo de venganza.
El paracaídas está lleno de comida: Hay carne... Pescado... Cereales y galletas...Fruta... Leche y agua... Todo menos una almohada. Quiero hablar con la almohada sobre Clove, porque no voy a hablar de Clove con Clove, sería ridículo, pero como no se han percatado de que existo me quedo sin almohada.
Hay una nota dentro del paracaídas; es de Brutus porque la letra lo delata y seguramente este dirigida a mí, que soy el único que logra entender esos símbolos. En el papel pone ''CATO, COMO VUELVAS A MENCIONAR EL TEMA DE ENOBARIA Y YO EN LOS JUEGOS ME ENCARGARÉ DE QUE TE MATEN DE LA PEOR MANERA POSIBLE'' Mierda, me va a matar.
Clove saca un paquete de galletas y comienza a comer, se la veía muerta de ganas por comer algo, yo estoy por robarla el paquete de galletas y comérmelas todas de golpe, pero mejor no, me niego a hacer el ridículo delante de Clove, que me vea el Capitolio me da igual, pero si me ve ella muero de vergüenza.
- ¿Quieres?- Pregunta Clove pasándome el paquete de galletas, saco una cuantas y comienzo a comer como un loco COMIDAAAA.
-¡Eh! ¡No te comas todas las galletas de golpe que yo también quiero comer!- Grita apartando el paquete de galletas, ya estaba dispuesto a quitarla más, sigo con hambre.
- Pero tengo hambre ¡Quiero galletas!- Digo quejándome e intentando quitarla el paquete de galletas de las manos, inclinándome y agitando los brazos.
Me caigo encima suya y ella me da un empujón, yo la agarro por las cintura y la giro, ahora ella esta encima mía.
Me vuelve a empujar, esta vez más flojo. Yo la empujo hacia un lado y al caer rueda. Me acerco a ella, se está riendo, me empiezo reír también y me empuja, caigo al Lago, rodando. Clove se incorpora y se acerca a la orilla. Se agacha riéndose de mí, la agarro por el tobillo y la tiro al agua.
Se levanta y me empieza a salpicar, yo también la salpico. Nos pasamos así un buen rato. Una de las veces la empujo y se cae. Como veo que al rato no sale me acerco preocupado.
Clove sale y me hace una ahogadilla. Comienzo a ahogarme, pero al cabo de un rato me suelta y nos ponemos a salpicarnos de nuevo.
Nunca me había divertido tanto ¿Esto lo que se siente cuando tienes un amigo? Como mola, ojalá hubiera tenido amigos antes...
Salimos del agua riendo, completamente empapados, bueno, al menos ya no me hace falta bañarme para lo que quedan de Juegos. Nos sentamos en un lado donde hace sol para secarnos.
-Te has quedado sin galletas, ahora están en el agua gracias a tu ''super inteligencia''- Dice, no sé si reírme o sentirme ofendido- Y como que no pienso bucear para buscar nada, seguro que ya están casi deshechas.
- Bueno, ya da igual, se me ha quitado el hambre- Comento, tanta risa me ha quitado el apetito.
Clove se lleva la palma de la mano a la frente, nos hemos estado peleando por un paquete de galletas y ahora resulta que no tengo hambre. Definitivamente soy desesperante.
Me quito la chaqueta y comienzo a escurrirla con las manos, a ver si se seca, parezco tonto, espero que Clove no me tome por imbécil. Ella se recuesta en un árbol para acomodarse y comienza a afilar un cuchillo.
Estoy planteándome eso de pedirla que sea mi novia, puede que tenga alguna posibilidad de que acepte, aunque sea mínima, pero seguramente sea un rechazo, porque no creo que la guste; soy un chico completamente feo y estoy como una cabra, pero podría ser, puede que la gusten esa clase de chicos, no estaría nada mal.
Me siento al lado de Clove, y disimuladamente estiro el brazo y se lo paso por los hombros. Greg suele hacer eso cuando intenta ligar, tal vez conmigo funcione. Aunque no quiero ser como Greg, es la única opción que tengo para llamar su atención.
Me decido a hablar con ella y pedirla que sea mi novia, puede que no sea la mejor opción, pero si no se lo digo acabaré explotando.
Cuando estoy a punto de hablar, el himno suena ¡PERO NO PUEDEN DEJARME TENER UN MOMENTO TRANQUILO CON ELLA, PARECE QUE LO HACEN A PROPÓSITO! ¡SEGURO QUE SI AHORA MISMO TUVIESE MI ALMOHADA NADA DE ESTO SUCEDERÍA!
- Atención, tributos- Suena la voz de Claudius con ese horrible acento- ¡Enhorabuena todos los supervivientes!- Nos felicita, muy considerado por su parte- Mañana al amanecer habrá un banquete ceremonial en la Cornucopia al que estáis invitados, en él encontraréis una mochila en la que habrá algo que necesitáis desesperadamente.
Desesperadamente.
¿Va a haber una almohada en la mochila? Porque eso lo necesito desesperadamente.
O una cara nueva un poco más atractiva que la actual tampoco estaría mal.
O incluso algún invento raro que haga que Clove se enamore perdidamente de mí, no estaría nada mal.
Clove se levanta y aparto el brazo.
- ¿Dónde vas?- Pregunto, observándola mientras guarda cosas en una mochila.
- A la Cornucopia- Responde- Voy a ir al banquete, sea lo que sea lo que hay en esa mochila, lo necesitamos desesperadamente.
- No pienso dejarte ir sola- Digo, pueden atacarla y no pienso dejarles que la hagan daño.
- ¿Por qué no? Voy a estar bien, no va a pasar nada- Dice, confío en ella, en lo que no me fío son de los demás.
- Podrían atacarte, mejor voy contigo- Contesto.
- Déjame ir solo por una vez, quiero ir a matar a la Chica en Llamas sola- Me pide sonriendo, mierda, está usando sus encantos para convencerme.
- Bueno...- CATO, NO CAIGAS EN SUS ENCANTOS ¡RESISTE!- Sigo sin estar muy seguro...
- Me encargaré de dar un buen espectáculo matándola- Añade, bueno, eso sí que me convence, así los patrocinadores nos mandarían cosas, pero sigo preocupado por lo que la podría pasar.
- Está bien- Digo con dificultad- ¿Pero qué pasará si te atacan?- La pregunto. Se queda pensativa un instante mientras guarda unas gafas de visión nocturna en la mochila.
- Pues gritaré tu nombre para que te enteres y vengas a ayudarme- Responde ¡Que bien! ¡Va a gritar mi nombre! Ah espera, que si lo grita la estará pasando algo malo.
Tengo que decirla algo antes de que se vaya a la Cornucopia, no pienso dejar que se vaya sin decirla lo que siento.
- Clove- Digo y ella se gira- No quiero que te hagan daño.
Se acerca a mí sonriendo y me da un beso en la frente. Me sonrojo completamente y me quedo boquiabierto.
-No te preocupes ¿Vale? Si te necesito, te llamo- Me dice y se vuelve a recoger su mochila.
Cierro la boca rápidamente porque me doy cuenta de que estoy babeando.
Oh Dios mío, Clove me ha besado, bueno, ha sido en la frente, pero no importa ¡Me ha besado!
Me decido decirla algo más, pero creo que voy a esperar.
Veo a Clove marcharse.
martes, 12 de marzo de 2013
17.
La cara del Presidente Snow sale en el cielo. Mira que me he visto en el espejo y soy feo, pero este es peor.
- Atención tributos- Dice Snow, que asco de tío- La regla de que solo puede ganar un tributo ha sido revocada- ¿Ya no puede ganar nadie?- Ahora pueden ganar dos, siempre y cuando sean del mismo Distrito.
Reacciono rápidamente y giro la cabeza como un buho (Casi me rompo el cuello) hacia Clove. La abrazo con tal fuerza que oigo el crujido de los cuchillos de su chaqueta al chocarse.
- Eeem... Cato- Dice Clove.
- ¿Si?- La pregunto en un tono de voz muy dulce.
- Me estas ahogando- Responde.
- ¡Oh, perdona!- Me disculpo mientras la suelto- Es que estaba contento por el cambio de normas y...
- Bueno, pues si quieres que las normas nuevas sirvan para algo, no me ahogues- Contesta.
- Vale, procuraré que no vuelva a pasar- Respondo con voz aguda.
- ¿A qué viene esa voz? Pareces un niño pequeño de esos- Dice, tiene razón, parezco un bebé.
Carraspeo muchas veces para hacer que se me quite la voz aguda.
- Ahora sí- Añado con una voz muy grave a propósito.
Clove se echa a reir. Nunca la he oido riéndose.
Su risa es preciosa... Como unas mariposas revoloteando por un campo florecido donde hay manzanos y de ellos recogo los frutos... Un momento ¿Desde cuándo a mí me gustan los campos? ¿Y cuándo he recogido yo manzanas? En cuanto salga de la Arena voy a hablar seriamente con la almohada.
- ¿Qué haces? Ahora pareces un lunático- Comenta. He debido poner una cara rara, pero es que es tan bonita... Sí, en cuanto salga de aquí voy a tener una larga charla de Vencedor a almohada.
Me parece que Clove no está tan contenta como yo por la nueva noticia, incluso creo que tenía ganas de atravesarme con uno de sus cuchillos.
Bueno, la verdad es que no me importaría que me matase, al menos si es Clove no me importa, sería como un halago que se importarse siquiera en matarme. Vale, necesito una charla con la almohada ahora mismo PATROCINADORES, TOMAD NOTA SI ES QUE ESTAIS AHÍ.
¿Por qué pienso tanto en ella? Ni idea, se supone que es normal entre adolescentes, bueno, yo nunca he sido normal, incluso mi madre me lo decía, también me llamaba feo. Y luego dicen que tus padres te quieren...
¡¿Y AHORA POR QUÉ NARICES PIENSO EN MI FAMILIA?!
Vuelvo a la realidad, porque me va a estallar la cabeza a este paso y la sangre no se quita de la ropa, lo digo por experiencia. Clove me mira arqueando una ceja, sí, definitivamente tengo que dejar de pensar.
DEJA LA MENTE EN BLANCO... NO PIÉNSES...
Carraspeo para aclararme la garganta.
- Perdona, estaba pensando en mis cosas- Digo.
- No, si a esa conclusión ya he llegado- Contesta- Deberías dejar de poner caras cuando piensas, que pareces tonto- Voy a poner eso en práctica.
- Sí, y mi cara no es que sea muy atractiva como para poner muecas- Digo disgustado.
- No estaba diciendo que fueses feo- Contesta. Me enrojezco como un tomate ¿Está diciéndo porque le parezco guapo, o por pena porque doy asco? Creo que es lo primero, eso es muy pero que muy bueno ¡Tengo posibilidades! ¡Bien!
Abro la boca para responder, todavía rojo, pero antes de poder decirlo, suena un grito.
- ¡Peeta!- Chilla la Chica de Fuego YA ESTÁ LA PESADA DE LAS NARICES DESTROZÁNDO EL MOMENTO ¡AHORA CUANDO LA VEA SE ENTERA!
- Ooooh, los Trágicos Amantes van a estar juntos, que romántico- Dice en tono burlón, me río- Bueno ¿Vamos a por ellos?- Pregunta, asiento intentándo ponerme serio, porque me ha hecho gracia la broma de los Enamorados.
Recogemos las mochilas, nos colocamos las gafas de visión nocturna y nos ponemos en camino. Como no aparezca ninguno de los del 12, voy a acabar explotando, como ya mencioné, pero esta vez no me va a preocupar manchar todo de sangre.
Con las gafas se logra visualizar todo, incluso ahora mismo estoy viendo un pájaro volar, sigo odiando a esos bichos.
- ¿Dónde crees que podrían estar?- Me pregunta Clove.
- En alguna cueva dándose besitos- Respondo riéndome entre dientes al pensar en esos dos niñatos besándose sin preocupación, como si no fuésemos allí a matarlos. Idiotas...
- O tal vez buscándose como locos dando saltitos y canturreando sus nombres- Dice mientras corta una rama para poder pasar, me río por lo bajo. Podría ser, puedes esperarte de esos muchas cosas.
Suena un siseo tras nosotros que comienza a acercarse.
Giramos la cabeza rápidamente para ver qué o quién es nuestro atacante y encontramos una enorme serpiente (De unos tres metros o cuatro) avanzando hacia nosotros.
Clove suelta un grito ahogado y comenzamos a retroceder rápidamente, mientras que la serpiente avanza con más velocidad. Comenzamos a huir de ella, pero logra seguirnos agilmente ¡¿Qué narices hace ese bicho aquí?! Maldito Capitolio...
Seguimos corriendo para que no nos alcance, pero nos va a resultar inútil, la serpiente sigue acercándose.
Me canso al poco tiempo, Clove sigue avanzando sin cansarse, Brutus tenía razón cuando decía que Clove tenía mucha resistencia.
Llegamos al punto donde ya no se puede huir, porque un enorme abismo nos corta el camino, mierda, estamos perdidos, no me apetece saltar para salir volando con el campo de fuerza.
Suena de nuevo el siseo de la serpiente acercándose velozmente, pero no hacia mí, sino en dirección hacia Clove. Abre la boca para mostrar sus afilados colmillos, directos al cuello de Clove.
No pienso permitírselo.
Grito y salto sobre la serpiente, que suelta un sonido horrible cuando mi espada entra en contacto con su cuello y se lo corto. Cae al suelo, muerta.
Un líquido moteado asqueroso sale del cuerpo de la serpiente, parece ser tiene la sangre podrida. Clove se queda rígida, completamente pálida, e incluso se puede ver su rostro palidecido sin las gafas de visión nocturna. Corro hacia ella.
- ¿Estas bien? ¿Te ha hecho algo?- Preguto preocupado, como la haya ocurrido algo juro que me cargo a todos los del Capitolio como sea.
- Estoy bien- Dice, volviendo a su tono de piel habitual, aunque se la nota un poco de pánico en la voz- Gracias.
- De nada- Respondo, menos mal que está bien, que si no remato a la serpiente y la tiro al abismo- Será mejor que nos marchemos- Añado, Clove asiente, me estan entrando ganas de abrazarla y no comprendo por qué. Nos ponemos en camino.
Comienza a amanecer.
- Atención tributos- Dice Snow, que asco de tío- La regla de que solo puede ganar un tributo ha sido revocada- ¿Ya no puede ganar nadie?- Ahora pueden ganar dos, siempre y cuando sean del mismo Distrito.
Reacciono rápidamente y giro la cabeza como un buho (Casi me rompo el cuello) hacia Clove. La abrazo con tal fuerza que oigo el crujido de los cuchillos de su chaqueta al chocarse.
- Eeem... Cato- Dice Clove.
- ¿Si?- La pregunto en un tono de voz muy dulce.
- Me estas ahogando- Responde.
- ¡Oh, perdona!- Me disculpo mientras la suelto- Es que estaba contento por el cambio de normas y...
- Bueno, pues si quieres que las normas nuevas sirvan para algo, no me ahogues- Contesta.
- Vale, procuraré que no vuelva a pasar- Respondo con voz aguda.
- ¿A qué viene esa voz? Pareces un niño pequeño de esos- Dice, tiene razón, parezco un bebé.
Carraspeo muchas veces para hacer que se me quite la voz aguda.
- Ahora sí- Añado con una voz muy grave a propósito.
Clove se echa a reir. Nunca la he oido riéndose.
Su risa es preciosa... Como unas mariposas revoloteando por un campo florecido donde hay manzanos y de ellos recogo los frutos... Un momento ¿Desde cuándo a mí me gustan los campos? ¿Y cuándo he recogido yo manzanas? En cuanto salga de la Arena voy a hablar seriamente con la almohada.
- ¿Qué haces? Ahora pareces un lunático- Comenta. He debido poner una cara rara, pero es que es tan bonita... Sí, en cuanto salga de aquí voy a tener una larga charla de Vencedor a almohada.
Me parece que Clove no está tan contenta como yo por la nueva noticia, incluso creo que tenía ganas de atravesarme con uno de sus cuchillos.
Bueno, la verdad es que no me importaría que me matase, al menos si es Clove no me importa, sería como un halago que se importarse siquiera en matarme. Vale, necesito una charla con la almohada ahora mismo PATROCINADORES, TOMAD NOTA SI ES QUE ESTAIS AHÍ.
¿Por qué pienso tanto en ella? Ni idea, se supone que es normal entre adolescentes, bueno, yo nunca he sido normal, incluso mi madre me lo decía, también me llamaba feo. Y luego dicen que tus padres te quieren...
¡¿Y AHORA POR QUÉ NARICES PIENSO EN MI FAMILIA?!
Vuelvo a la realidad, porque me va a estallar la cabeza a este paso y la sangre no se quita de la ropa, lo digo por experiencia. Clove me mira arqueando una ceja, sí, definitivamente tengo que dejar de pensar.
DEJA LA MENTE EN BLANCO... NO PIÉNSES...
Carraspeo para aclararme la garganta.
- Perdona, estaba pensando en mis cosas- Digo.
- No, si a esa conclusión ya he llegado- Contesta- Deberías dejar de poner caras cuando piensas, que pareces tonto- Voy a poner eso en práctica.
- Sí, y mi cara no es que sea muy atractiva como para poner muecas- Digo disgustado.
- No estaba diciendo que fueses feo- Contesta. Me enrojezco como un tomate ¿Está diciéndo porque le parezco guapo, o por pena porque doy asco? Creo que es lo primero, eso es muy pero que muy bueno ¡Tengo posibilidades! ¡Bien!
Abro la boca para responder, todavía rojo, pero antes de poder decirlo, suena un grito.
- ¡Peeta!- Chilla la Chica de Fuego YA ESTÁ LA PESADA DE LAS NARICES DESTROZÁNDO EL MOMENTO ¡AHORA CUANDO LA VEA SE ENTERA!
- Ooooh, los Trágicos Amantes van a estar juntos, que romántico- Dice en tono burlón, me río- Bueno ¿Vamos a por ellos?- Pregunta, asiento intentándo ponerme serio, porque me ha hecho gracia la broma de los Enamorados.
Recogemos las mochilas, nos colocamos las gafas de visión nocturna y nos ponemos en camino. Como no aparezca ninguno de los del 12, voy a acabar explotando, como ya mencioné, pero esta vez no me va a preocupar manchar todo de sangre.
Con las gafas se logra visualizar todo, incluso ahora mismo estoy viendo un pájaro volar, sigo odiando a esos bichos.
- ¿Dónde crees que podrían estar?- Me pregunta Clove.
- En alguna cueva dándose besitos- Respondo riéndome entre dientes al pensar en esos dos niñatos besándose sin preocupación, como si no fuésemos allí a matarlos. Idiotas...
- O tal vez buscándose como locos dando saltitos y canturreando sus nombres- Dice mientras corta una rama para poder pasar, me río por lo bajo. Podría ser, puedes esperarte de esos muchas cosas.
Suena un siseo tras nosotros que comienza a acercarse.
Giramos la cabeza rápidamente para ver qué o quién es nuestro atacante y encontramos una enorme serpiente (De unos tres metros o cuatro) avanzando hacia nosotros.
Clove suelta un grito ahogado y comenzamos a retroceder rápidamente, mientras que la serpiente avanza con más velocidad. Comenzamos a huir de ella, pero logra seguirnos agilmente ¡¿Qué narices hace ese bicho aquí?! Maldito Capitolio...
Seguimos corriendo para que no nos alcance, pero nos va a resultar inútil, la serpiente sigue acercándose.
Me canso al poco tiempo, Clove sigue avanzando sin cansarse, Brutus tenía razón cuando decía que Clove tenía mucha resistencia.
Llegamos al punto donde ya no se puede huir, porque un enorme abismo nos corta el camino, mierda, estamos perdidos, no me apetece saltar para salir volando con el campo de fuerza.
Suena de nuevo el siseo de la serpiente acercándose velozmente, pero no hacia mí, sino en dirección hacia Clove. Abre la boca para mostrar sus afilados colmillos, directos al cuello de Clove.
No pienso permitírselo.
Grito y salto sobre la serpiente, que suelta un sonido horrible cuando mi espada entra en contacto con su cuello y se lo corto. Cae al suelo, muerta.
Un líquido moteado asqueroso sale del cuerpo de la serpiente, parece ser tiene la sangre podrida. Clove se queda rígida, completamente pálida, e incluso se puede ver su rostro palidecido sin las gafas de visión nocturna. Corro hacia ella.
- ¿Estas bien? ¿Te ha hecho algo?- Preguto preocupado, como la haya ocurrido algo juro que me cargo a todos los del Capitolio como sea.
- Estoy bien- Dice, volviendo a su tono de piel habitual, aunque se la nota un poco de pánico en la voz- Gracias.
- De nada- Respondo, menos mal que está bien, que si no remato a la serpiente y la tiro al abismo- Será mejor que nos marchemos- Añado, Clove asiente, me estan entrando ganas de abrazarla y no comprendo por qué. Nos ponemos en camino.
Comienza a amanecer.
lunes, 4 de marzo de 2013
16.
Me levanto por una cancioncita de un Sinsajo.
Abro los ojos y veo una hogera, seguramente habran pensado que estabamos dormidos, bueno, es que lo estábamos.
Mejor vamos a dejar que la ''superfuerza'' de Marvel se encargue de ello. Me empiezo a reir como un psicópata (mi risa habitual) al pensar que Marvel puede matar a algún tributo, incluso la niñita del 11 podría con él.
Clove se despierta sobresaltada. Mierda, debería aprender a no hacer ruido.
- ¿Qué haces riéndote solo?- Pregunta Clove.
- Emm... Nada, he oido un Sinsajo y me he empezado a reír de Marvel- Respondo.
-Cato ¿Qué clase de retraso tienes? ¿Cómo puedes comparar algo tan adorable como un sinsajo, con algo tan...?- Seguramente se la esten ocurriendo más de cien mil insultos- Como Marvel- Dice terminando la frase, eso si que es un insulto gordo.
Oímos un ''¡Katniss!'' Que proviene de la niñita del 11. Entonces suena un cañonazo. Ojalá haya sido de Marvel.
Empiezan a sonar otra vez cancioncitas de sinsajos distintas, me están volviendo loco.
Seguido de eso suena un segundo cañonazo.
- ¿De quién crees que habrán sido esos cañonazos?- Pregunto a Clove.
-No sé pero espero que alguno haya sido de Marvel- Responde, por fin estamos de acuerdo en el tema de Marvel. Tenemos demasiadas cosas en común, quiero casarme con ella, pero eso no va a ser posible, solo puede ganar uno... Creo que voy a tener que dejar de imaginarme cosas.
Tengo una idea pero no se que va a pensar.
- ¿Vamos a ver que ha pasado?- Me arriesgo a preguntar.
- ¡Pues claro que sí!- Responde, esto va bien.
Llegamos a un lugar del bosque y me fijo en que hay restos de sangre en la hierba, al menos que hayan sido de algún bicho, yo juraría que es de Marvel.
-Me parece que esta sangre es
de...- Comento.
-De Marvel- Termina Clove la frase. ES PERFECTA ¡QUE SE CASE CONMIGO DE UNA VEZ!
- Cato ¿en qué piensas?- Pregunta, he debido hacer algo raro.
- ¿Eeeeh?- Digo volviendo a la realidad- Ah, en nada.
- No, si ya se ve- Dice, creo que me está llamando tonto.
Clove se va a cazar algo para la comida y yo me quedo solo. Empiezo a recapacitar.
1° Me he quedado a solas con Clove- Eso bien.
2° Marvel se ha marchado y creo que está muerto- Eso muy bien.
3° Creo que Clove insinua que soy tonto.- Eso mal.
4° Uno de los dos tiene que morir- ESO FATAL.
Al rato viene Clove con unos pájaros raros.
- ¿Qué son?- Pregunto mientras los despellejo, que asco de bichos.
- Gransos- Responde- Son los únicos pájaros de por aquí comestibles.
- Pues son asquerosos- Comento. Ella se encoje de hombros.
Sale un líquido verde del granso que despellejaba. Sí, dan asco definitivamente.
- Oye ¿Y qué ha pasado con el chico amoroso?- Me pregunta Clove.
A ver cómo la explico que me he cargado a nuestro aliado.
- No estoy seguro...- La verdad no la he mentido, debería estar muerto.
- ¿Seguro que no sabes dónde está?
- Clove, era un traidor. La verdad es que no se donde está, pero dando saltitos seguro que no- La respondo mirando al suelo.
- ¿Qué se supone que le has hecho?- Ahora sí que no se que decirla.
- Clove no se como sigue vivo, le rajé la pierna, debería de haberse desangrado.
- Anda que tu también, podrías haberlo matado, así le ahorras el sufrimiento- Dice ella, PERO SI ERA UN TRAIDOR. Jo...
- Clove, cuando le vi estaba salvando a la chica en llamas.
- ¿QUE ESTABA QUÉ? Yo lo hubiera partido en cachitos, ERES UN BLANDO- Eso duele...
- OYE NO TE PASES, NI QUE FUESE UNA BOLA DE ALGODÓN- Grito. No quiero chillarla, ni siquiera se por qué lo hago.
- Vale, no hace falta que te pongas así de borde, no hablaba en serio- Dice. Siempre la cago, y luego quiero que sea mi novia y casarme con ella, a este paso ni amenazándola.
-Perdona, es que me duele un poco la cabeza...-La verdad es que no me duele, pero necesitaba que encontrar una excusa para que no se cabrease conmigo.
-Ah vale- Dice Clove ¡Que bien! ¡Me ha perdonado!- ¿Tienes fiebre o algo?- Pregunta ¿Piensa que realmente estoy enfermo? A lo mejor si digo que sí pondrá más atención en mí.
- Creo que tengo bastante- Digo fingiéndo que estoy mareándome, porfavor, que se lo crea.
Clove se sienta a mi lado y pone su mano en mi frente. Me pongo rojo como un tomate.
- Caray, pues si que tienes fiebre, te has puesto incluso colorado- Comenta Clove. Mierda, que vergüenza, me ha visto, y encima me he puesto aún más rojo.
- Si... Aunque puede que sea por... Por el calor...- Digo casi entrecortado a punto de estallar de vergüenza.
- Pues será mejor que bebas algo de agua, no vaya a ser que te acabes insolando- Contesta pasándome una cantimplora, me bebo la mitad y el resto me la echo en la cara. Buf, ahora estoy más fresco.
- ¿Mejor ahora?- Pregunta.
- Si, gracias- La agradezco intentándo aguantarme las ganas de saltar sobre ella y besarla.
Acabamos de comer y nos ponemos en camino, tenemos que buscar a alguno de los trágicos amantes, que a este paso nos van a quitar los patrocinadores, y eso que ahora no van juntos.
Me pregunto si nos adorarían si Clove y yo fuéramos amantes trágicos, porque por mí no me importaría tener un romance de esos con ella.
Avanzamos hasta donde herí al Chico Amoroso, no podrá haber ido muy lejos, al menos que se fuera arrastrando como una serpiente y lograra por arte de magia subir a un árbol.
Encontramos restos de sangre sobre unas piedras, así que ha estado por aquí, o a la Barbie la dio por desangrarse, seguramente se habrá escondido en alguna laguna de allí, porque hay varias por esta zona. Será mejor que se esconda bien. Continuamos hasta una laguna llena de rocas ¿DÓNDE NARICES ESTÁ EL PITA DE LAS NARICES? ¡CUANDO LO VEA LO MATO, PERO BIEN MATADO!
Clove investiga para ver si está por aquí, pero ni rastro, como no se haya camuflado de roca, lo va a encontrar.
- Ni rastro- Dice en tono decepcionado- Mejor volvamos al campamento.
Cabreados, volvemos al Lago. Estoy por abrirle la cabeza a alguien, menos a Clove, claro está. Al Enamorado le abriré la cabeza como a ún melón.
Comemos las sobras de la comida, porque no estamos de humor, y si cazo algo seguro que lo desguartizo.
- ¿Dónde crees que puede estar el Chico Amoroso?- Pregunta Clove, justo cuando voy a responderla suena el himno.
La primera que sale es la niñita del 11, pobre chica, a mí me daría pena matarla, y eso que según la gente soy un psicópata.
Y el otro muerto es... MARVEL ¡MARVEL HA MUERTO! ¡GENIAL! SOY COMPLETAMENTE FELIZ.
- ¡Bien! ¡Marvel ha muerto!- Grito felizmente aplaudiendo. Clove se sobresalta ante mi reacción, ahora me tomará por loco.
Sale el sello y todo se vuelve oscuro.
Entonces suena el cambio de normas.
Abro los ojos y veo una hogera, seguramente habran pensado que estabamos dormidos, bueno, es que lo estábamos.
Mejor vamos a dejar que la ''superfuerza'' de Marvel se encargue de ello. Me empiezo a reir como un psicópata (mi risa habitual) al pensar que Marvel puede matar a algún tributo, incluso la niñita del 11 podría con él.
Clove se despierta sobresaltada. Mierda, debería aprender a no hacer ruido.
- ¿Qué haces riéndote solo?- Pregunta Clove.
- Emm... Nada, he oido un Sinsajo y me he empezado a reír de Marvel- Respondo.
-Cato ¿Qué clase de retraso tienes? ¿Cómo puedes comparar algo tan adorable como un sinsajo, con algo tan...?- Seguramente se la esten ocurriendo más de cien mil insultos- Como Marvel- Dice terminando la frase, eso si que es un insulto gordo.
Oímos un ''¡Katniss!'' Que proviene de la niñita del 11. Entonces suena un cañonazo. Ojalá haya sido de Marvel.
Empiezan a sonar otra vez cancioncitas de sinsajos distintas, me están volviendo loco.
Seguido de eso suena un segundo cañonazo.
- ¿De quién crees que habrán sido esos cañonazos?- Pregunto a Clove.
-No sé pero espero que alguno haya sido de Marvel- Responde, por fin estamos de acuerdo en el tema de Marvel. Tenemos demasiadas cosas en común, quiero casarme con ella, pero eso no va a ser posible, solo puede ganar uno... Creo que voy a tener que dejar de imaginarme cosas.
Tengo una idea pero no se que va a pensar.
- ¿Vamos a ver que ha pasado?- Me arriesgo a preguntar.
- ¡Pues claro que sí!- Responde, esto va bien.
Llegamos a un lugar del bosque y me fijo en que hay restos de sangre en la hierba, al menos que hayan sido de algún bicho, yo juraría que es de Marvel.
-Me parece que esta sangre es
de...- Comento.
-De Marvel- Termina Clove la frase. ES PERFECTA ¡QUE SE CASE CONMIGO DE UNA VEZ!
- Cato ¿en qué piensas?- Pregunta, he debido hacer algo raro.
- ¿Eeeeh?- Digo volviendo a la realidad- Ah, en nada.
- No, si ya se ve- Dice, creo que me está llamando tonto.
Clove se va a cazar algo para la comida y yo me quedo solo. Empiezo a recapacitar.
1° Me he quedado a solas con Clove- Eso bien.
2° Marvel se ha marchado y creo que está muerto- Eso muy bien.
3° Creo que Clove insinua que soy tonto.- Eso mal.
4° Uno de los dos tiene que morir- ESO FATAL.
Al rato viene Clove con unos pájaros raros.
- ¿Qué son?- Pregunto mientras los despellejo, que asco de bichos.
- Gransos- Responde- Son los únicos pájaros de por aquí comestibles.
- Pues son asquerosos- Comento. Ella se encoje de hombros.
Sale un líquido verde del granso que despellejaba. Sí, dan asco definitivamente.
- Oye ¿Y qué ha pasado con el chico amoroso?- Me pregunta Clove.
A ver cómo la explico que me he cargado a nuestro aliado.
- No estoy seguro...- La verdad no la he mentido, debería estar muerto.
- ¿Seguro que no sabes dónde está?
- Clove, era un traidor. La verdad es que no se donde está, pero dando saltitos seguro que no- La respondo mirando al suelo.
- ¿Qué se supone que le has hecho?- Ahora sí que no se que decirla.
- Clove no se como sigue vivo, le rajé la pierna, debería de haberse desangrado.
- Anda que tu también, podrías haberlo matado, así le ahorras el sufrimiento- Dice ella, PERO SI ERA UN TRAIDOR. Jo...
- Clove, cuando le vi estaba salvando a la chica en llamas.
- ¿QUE ESTABA QUÉ? Yo lo hubiera partido en cachitos, ERES UN BLANDO- Eso duele...
- OYE NO TE PASES, NI QUE FUESE UNA BOLA DE ALGODÓN- Grito. No quiero chillarla, ni siquiera se por qué lo hago.
- Vale, no hace falta que te pongas así de borde, no hablaba en serio- Dice. Siempre la cago, y luego quiero que sea mi novia y casarme con ella, a este paso ni amenazándola.
-Perdona, es que me duele un poco la cabeza...-La verdad es que no me duele, pero necesitaba que encontrar una excusa para que no se cabrease conmigo.
-Ah vale- Dice Clove ¡Que bien! ¡Me ha perdonado!- ¿Tienes fiebre o algo?- Pregunta ¿Piensa que realmente estoy enfermo? A lo mejor si digo que sí pondrá más atención en mí.
- Creo que tengo bastante- Digo fingiéndo que estoy mareándome, porfavor, que se lo crea.
Clove se sienta a mi lado y pone su mano en mi frente. Me pongo rojo como un tomate.
- Caray, pues si que tienes fiebre, te has puesto incluso colorado- Comenta Clove. Mierda, que vergüenza, me ha visto, y encima me he puesto aún más rojo.
- Si... Aunque puede que sea por... Por el calor...- Digo casi entrecortado a punto de estallar de vergüenza.
- Pues será mejor que bebas algo de agua, no vaya a ser que te acabes insolando- Contesta pasándome una cantimplora, me bebo la mitad y el resto me la echo en la cara. Buf, ahora estoy más fresco.
- ¿Mejor ahora?- Pregunta.
- Si, gracias- La agradezco intentándo aguantarme las ganas de saltar sobre ella y besarla.
Acabamos de comer y nos ponemos en camino, tenemos que buscar a alguno de los trágicos amantes, que a este paso nos van a quitar los patrocinadores, y eso que ahora no van juntos.
Me pregunto si nos adorarían si Clove y yo fuéramos amantes trágicos, porque por mí no me importaría tener un romance de esos con ella.
Avanzamos hasta donde herí al Chico Amoroso, no podrá haber ido muy lejos, al menos que se fuera arrastrando como una serpiente y lograra por arte de magia subir a un árbol.
Encontramos restos de sangre sobre unas piedras, así que ha estado por aquí, o a la Barbie la dio por desangrarse, seguramente se habrá escondido en alguna laguna de allí, porque hay varias por esta zona. Será mejor que se esconda bien. Continuamos hasta una laguna llena de rocas ¿DÓNDE NARICES ESTÁ EL PITA DE LAS NARICES? ¡CUANDO LO VEA LO MATO, PERO BIEN MATADO!
Clove investiga para ver si está por aquí, pero ni rastro, como no se haya camuflado de roca, lo va a encontrar.
- Ni rastro- Dice en tono decepcionado- Mejor volvamos al campamento.
Cabreados, volvemos al Lago. Estoy por abrirle la cabeza a alguien, menos a Clove, claro está. Al Enamorado le abriré la cabeza como a ún melón.
Comemos las sobras de la comida, porque no estamos de humor, y si cazo algo seguro que lo desguartizo.
- ¿Dónde crees que puede estar el Chico Amoroso?- Pregunta Clove, justo cuando voy a responderla suena el himno.
La primera que sale es la niñita del 11, pobre chica, a mí me daría pena matarla, y eso que según la gente soy un psicópata.
Y el otro muerto es... MARVEL ¡MARVEL HA MUERTO! ¡GENIAL! SOY COMPLETAMENTE FELIZ.
- ¡Bien! ¡Marvel ha muerto!- Grito felizmente aplaudiendo. Clove se sobresalta ante mi reacción, ahora me tomará por loco.
Sale el sello y todo se vuelve oscuro.
Entonces suena el cambio de normas.
domingo, 3 de marzo de 2013
15.
Mi primera reacción: me pongo a chillar. Mi segunda reacción: me pongo a tirarme de los pelos y comienzo a pegar puñetazos al suelo. Tercera reacción: corro hasta donde se supone que deberían estar las provisiones, pero no hay nada, solo el chico del distrito 3, que esta tirando piedras para comprobar que no queda ni una bomba activa.
Entonces me acerco a el y le comienzo gritar:
- ¿ERES TONTO ? ¡DECÍAS QUE FUNCIONARÍA! ¡IMBÉCIL!
Comienzo a gritarle palabrotas, Marvel y Clove se quedan boquiabiertos ante mi reacción, pero yo no estoy satisfecho.
El chico del 3 echa a correr, por fin me tiene miedo. Solo pienso en un cosa: MATAR, MATAR, MATAR, ah, y si puedo, impresionar a Clove.
Le consigo alcanzar y lo agarro de la cabeza con las dos manos haciéndosela girar. El movimiento hace que se le rompa el cuello y cae al suelo. Muerto.
Suena su cañonazo.
Marvel pone cara de asco, y Clove se queda boquiabierta, he logrado impresionarla. Marvel se da cuenta, y hace si como si lo que acabo de hacer fuera muy sencillo. La verdad es que yo también me he sorprendido, una vez lo intenté con Greg y no lo conseguí.
Se acercan a mí e intentan calmarme. Marvel me irrita y hace que me cabree aún más contándome que estoy loco. Clove señala el cielo diciéndome que quien lo ha hecho tiene que estar muerto mientras apoya la mano en mi hombro, tranquilizándome y haciéndome que note una sensación deliciosa y algo rara.
Inspiro... Aspiro..No quiero volverme loco delante de ella por que al final la haría daño.
- ¿Qué tal si rompemos la alianza?- Pregunta Marvel, ya me he vuelto a cabrear.
- ¿¡QUE TAL SI TE MATO!?- Le grito a punto de partirle el cuello como al chico del 3. Estoy que exploto.
- Cato, piénsalo un momento- Dice Clove en tono tranquilo- Si las provisiones no hubiesen estallado no hubiera muerto el chico del 3- Explica Clove- Entonces nadie moriría y los Juegos se harían eternos- ''Ojalá fueran eternos para estar contigo'' pienso mirándola con atención, espero no haberlo dicho en alto porque moriría de vergüenza.
- Quiero volver al bosque para ir a por quien ha hecho esto- Digo frunciendo el ceño, estoy enfadado, pero con Clove no.
- Si ¿Para encontrarte con qué? ¿Con una ardilla?-Se burla Marvel, hasta aquí hemos llegado.
- ¿Y A TI QUE TE PASA? ¿TE CREES GUAY POR SER IMBÉCIL, CHAVAL?- Chillo, Clove me intenta calmar, pero ni siquiera ella lo consigue- NO CLOVE, DÉJAME, DEJA QUE LE ABRA LA CABEZA Y LE SAQUE LOS SESOS, SI ES QUE TIENE.
- CALLA, AL MENOS TENGO CARA BONITA, NO COMO LA TUYA ¡DAS ASCO!- Me grita Marvel, me pongo como una furia.
- ¡CATO, MARVEL! ¡DEJAD DE ACTUAR COMO NIÑOS PEQUEÑOS!- Grita Clove, me sorprende que pueda chillar de esa forma.
- Pero... ¡Él ha empezado!- Intento defenderme.
- ¿Yo?- Se queja Marvel- Yo aquí no soy el idiota que se pone a gritar a la gente- Ya estoy harto.
- CÁLLATE Y A VER SI TE LARGAS DE UNA VEZ- Le chillo y nos volvemos a poner a gritar. Clove se lleva la palma de la mano a la cara; somos desesperantes.
Al rato Clove se pone entre nosotros dos y nos callamos, aunque Marvel me este poniendo de los nervios no pienso gritarla.
- Bien, ya que habéis dejado de gritaros, será mejor que os vayáis a discutir a otra parta- Dice Clove.
- ¿Irnos? ¿Por qué?- Pregunta Marvel, en cuanto nos marchemos le voy a dar tal torta que se va a espabilar de una vez.
- Porque tengo que bañarme y no es que me haga mucha gracia que me veáis Responde. Ah, ahora entiendo por quiere que nos vayamos.
- ¿Debemos irnos?- Vuelve a preguntar Marvel, esta vez en tono pervertido. Clove le mira de tal forma que veo la respuesta en su mirada: ''COMO NO TE LARGUES TE CLAVO UN CUCHILLO EN LA GARGANTA, A VER SI TE HACE TANTA GRACIA''
Llevo a Marvel casi a rastras fuera de el Lago, no me fió de él ni un pelo, y como se le pase por la cabeza volver para ver a Clove bañándose le hago pedazos.
Le suelto porque no para de forcejear y se asoma por unos arbustos; está espiando a Clove ¡AHORA SI QUE LO MATO, LE ARRANCO LOS OJOS Y LOS USO COMO PELOTAS DE TENIS!
Le agarro del cuello de la chaqueta y lo arrastro hasta donde Clove no está a la vista.
- ¡TÚ!- Le grito, estoy que hecho humo- ¡DEJA EN PAZ A MI CHICA!
- ¿Tu chica?- Dice Marvel entre risas, me sonrojo al pensar en ella- ¿En dónde? ¿En Imaginalandia?
- ¡PUES SI! ¿ALGÚN PROBLEMA?
- SÍ ¡TU CARA!- Contesta chillando.
Le pego tal puñetazo que le deja el ojo morado. Comenzamos otra vez a gritarnos e insultarnos, estas cosas no las deberían oír los niños pequeños, no es apto para su edad este vocabulario.
De repente oímos una especie de sonido parecido al de un cascabel y miramos al cielo ¡Un paracaídas plateado! Seguramente los patrocinadores estén deseando que nos matemos entre nosotros. Avanzamos rápidamente hasta donde cae el paracaídas.
Al llegar, vemos a Clove (Ya vestida) sosteniendo el paracaídas en sus manos para abrirlo. Dentro hay una especie de cilindro raro que no sé ni para qué narices nos va a servir.
- ¿Qué pone en el mensaje?- Pregunta Marvel, por una vez no tengo ganas de matarlo, tengo ganas de chillarle.
- ''Aplíquese en las picaduras de rastrevíspula''- Responde Clove, nos vendrán bien, yo me he estado rascando la picadura y ahora da asco.
- ¿Por qué nos la han enviado ahora si la necesitábamos desde hace ya un tiempo?- Pregunto pensativo, Clove se encoje de hombros.
- Puede que les haya gustado vuestra pelea o algo así- Comenta, ni idea.
- Yo creo que no ha sido eso- Dice Marvel otra vez en tono de pervertido.
Clove se levanta y le da un puñetazo en toda la cara que hace que le comience a sangrar la nariz ¡EN TU NARIZ, MARVEL! Literalmente.
A Clove no la ha gustado nada ese comentario, le mira con odio, se ha pasado. Ya somos dos cabreados con él.
- ¿Por qué todos ahora estáis contra de mí?- Dice Marvel limpiándose la sangre.
- PORQUE NO TE AGUANTAMOS- Le chillo.
- Bueno, pues si no me aguantais mejor me voy, a ver si encuentro a algún tributo- Dice Marvel con un poco de tristeza. ¡BIEN, AL FIN SE VA!
Prepara una mochila con objetos, ¡POR FIN SE LARGA, ES EL DÍA MÁS FELIZ DE LOS JUEGOS! Se va con la cabeza gacha, yo me despido con una sonrisa triunfal haciéndo un gesto muy desagradable con la mano.
- Pobrecillo, nos hemos pasado- Dice Clove sintiendo lástima, por mí como si lo matan.
- Déjalo, al final volverá, no tiene ni idea de supervivencia- Respondo, a mi me da igual, es un bocazas.
- ¿Crees que me he pasado al darle?- Pregunta, a mi me ha parecido justo lo de pegarle. Me encojo de hombros, porque si respondo me pondré a insultarlo.
La observo con atención mientras intenta secarse el pelo; sus ojos de color miel aparentan ser dorados en la luz del sol, parece un ángel...
- Cato ¿Quieres dejar de mirarme como un tonto?- Vuelvo a la realidad. Mierda, se ha dado cuenta, encima me había quedado boquiabierto como un imbécil.
Paso el cilindro por la picadura; escuece lo suyo, maldito cacharro.
Se nota mucho la ausencia de Marvel,ahora todo es apacible y se puede vivir en armonía.
A la noche cenamos fruta, porque no pensamos cocinar ninguno de los dos ahora mismo.
Suena el himno y aparecen el fideo del 3 y el cojo del 10 en el cielo.
Un momento... Ya deberían haber entrevistado a nuestras familias, eso incluye a Greg. Seguro que se ha estado pavoneando delante de todos, que asco me da.
Clove bosteza y se queda dormida apoyando la cabeza sobre mi hombro y me pongo completamente rojo.
- Bu-Buenas no-Noches Clove- Digo sonrojado, pero ella ya está dormida, la paso el brazo sobre los hombros.
Dos menos, quedamos ocho.
Entonces me acerco a el y le comienzo gritar:
- ¿ERES TONTO ? ¡DECÍAS QUE FUNCIONARÍA! ¡IMBÉCIL!
Comienzo a gritarle palabrotas, Marvel y Clove se quedan boquiabiertos ante mi reacción, pero yo no estoy satisfecho.
El chico del 3 echa a correr, por fin me tiene miedo. Solo pienso en un cosa: MATAR, MATAR, MATAR, ah, y si puedo, impresionar a Clove.
Le consigo alcanzar y lo agarro de la cabeza con las dos manos haciéndosela girar. El movimiento hace que se le rompa el cuello y cae al suelo. Muerto.
Suena su cañonazo.
Marvel pone cara de asco, y Clove se queda boquiabierta, he logrado impresionarla. Marvel se da cuenta, y hace si como si lo que acabo de hacer fuera muy sencillo. La verdad es que yo también me he sorprendido, una vez lo intenté con Greg y no lo conseguí.
Se acercan a mí e intentan calmarme. Marvel me irrita y hace que me cabree aún más contándome que estoy loco. Clove señala el cielo diciéndome que quien lo ha hecho tiene que estar muerto mientras apoya la mano en mi hombro, tranquilizándome y haciéndome que note una sensación deliciosa y algo rara.
Inspiro... Aspiro..No quiero volverme loco delante de ella por que al final la haría daño.
- ¿Qué tal si rompemos la alianza?- Pregunta Marvel, ya me he vuelto a cabrear.
- ¿¡QUE TAL SI TE MATO!?- Le grito a punto de partirle el cuello como al chico del 3. Estoy que exploto.
- Cato, piénsalo un momento- Dice Clove en tono tranquilo- Si las provisiones no hubiesen estallado no hubiera muerto el chico del 3- Explica Clove- Entonces nadie moriría y los Juegos se harían eternos- ''Ojalá fueran eternos para estar contigo'' pienso mirándola con atención, espero no haberlo dicho en alto porque moriría de vergüenza.
- Quiero volver al bosque para ir a por quien ha hecho esto- Digo frunciendo el ceño, estoy enfadado, pero con Clove no.
- Si ¿Para encontrarte con qué? ¿Con una ardilla?-Se burla Marvel, hasta aquí hemos llegado.
- ¿Y A TI QUE TE PASA? ¿TE CREES GUAY POR SER IMBÉCIL, CHAVAL?- Chillo, Clove me intenta calmar, pero ni siquiera ella lo consigue- NO CLOVE, DÉJAME, DEJA QUE LE ABRA LA CABEZA Y LE SAQUE LOS SESOS, SI ES QUE TIENE.
- CALLA, AL MENOS TENGO CARA BONITA, NO COMO LA TUYA ¡DAS ASCO!- Me grita Marvel, me pongo como una furia.
- ¡CATO, MARVEL! ¡DEJAD DE ACTUAR COMO NIÑOS PEQUEÑOS!- Grita Clove, me sorprende que pueda chillar de esa forma.
- Pero... ¡Él ha empezado!- Intento defenderme.
- ¿Yo?- Se queja Marvel- Yo aquí no soy el idiota que se pone a gritar a la gente- Ya estoy harto.
- CÁLLATE Y A VER SI TE LARGAS DE UNA VEZ- Le chillo y nos volvemos a poner a gritar. Clove se lleva la palma de la mano a la cara; somos desesperantes.
Al rato Clove se pone entre nosotros dos y nos callamos, aunque Marvel me este poniendo de los nervios no pienso gritarla.
- Bien, ya que habéis dejado de gritaros, será mejor que os vayáis a discutir a otra parta- Dice Clove.
- ¿Irnos? ¿Por qué?- Pregunta Marvel, en cuanto nos marchemos le voy a dar tal torta que se va a espabilar de una vez.
- Porque tengo que bañarme y no es que me haga mucha gracia que me veáis Responde. Ah, ahora entiendo por quiere que nos vayamos.
- ¿Debemos irnos?- Vuelve a preguntar Marvel, esta vez en tono pervertido. Clove le mira de tal forma que veo la respuesta en su mirada: ''COMO NO TE LARGUES TE CLAVO UN CUCHILLO EN LA GARGANTA, A VER SI TE HACE TANTA GRACIA''
Llevo a Marvel casi a rastras fuera de el Lago, no me fió de él ni un pelo, y como se le pase por la cabeza volver para ver a Clove bañándose le hago pedazos.
Le suelto porque no para de forcejear y se asoma por unos arbustos; está espiando a Clove ¡AHORA SI QUE LO MATO, LE ARRANCO LOS OJOS Y LOS USO COMO PELOTAS DE TENIS!
Le agarro del cuello de la chaqueta y lo arrastro hasta donde Clove no está a la vista.
- ¡TÚ!- Le grito, estoy que hecho humo- ¡DEJA EN PAZ A MI CHICA!
- ¿Tu chica?- Dice Marvel entre risas, me sonrojo al pensar en ella- ¿En dónde? ¿En Imaginalandia?
- ¡PUES SI! ¿ALGÚN PROBLEMA?
- SÍ ¡TU CARA!- Contesta chillando.
Le pego tal puñetazo que le deja el ojo morado. Comenzamos otra vez a gritarnos e insultarnos, estas cosas no las deberían oír los niños pequeños, no es apto para su edad este vocabulario.
De repente oímos una especie de sonido parecido al de un cascabel y miramos al cielo ¡Un paracaídas plateado! Seguramente los patrocinadores estén deseando que nos matemos entre nosotros. Avanzamos rápidamente hasta donde cae el paracaídas.
Al llegar, vemos a Clove (Ya vestida) sosteniendo el paracaídas en sus manos para abrirlo. Dentro hay una especie de cilindro raro que no sé ni para qué narices nos va a servir.
- ¿Qué pone en el mensaje?- Pregunta Marvel, por una vez no tengo ganas de matarlo, tengo ganas de chillarle.
- ''Aplíquese en las picaduras de rastrevíspula''- Responde Clove, nos vendrán bien, yo me he estado rascando la picadura y ahora da asco.
- ¿Por qué nos la han enviado ahora si la necesitábamos desde hace ya un tiempo?- Pregunto pensativo, Clove se encoje de hombros.
- Puede que les haya gustado vuestra pelea o algo así- Comenta, ni idea.
- Yo creo que no ha sido eso- Dice Marvel otra vez en tono de pervertido.
Clove se levanta y le da un puñetazo en toda la cara que hace que le comience a sangrar la nariz ¡EN TU NARIZ, MARVEL! Literalmente.
A Clove no la ha gustado nada ese comentario, le mira con odio, se ha pasado. Ya somos dos cabreados con él.
- ¿Por qué todos ahora estáis contra de mí?- Dice Marvel limpiándose la sangre.
- PORQUE NO TE AGUANTAMOS- Le chillo.
- Bueno, pues si no me aguantais mejor me voy, a ver si encuentro a algún tributo- Dice Marvel con un poco de tristeza. ¡BIEN, AL FIN SE VA!
Prepara una mochila con objetos, ¡POR FIN SE LARGA, ES EL DÍA MÁS FELIZ DE LOS JUEGOS! Se va con la cabeza gacha, yo me despido con una sonrisa triunfal haciéndo un gesto muy desagradable con la mano.
- Pobrecillo, nos hemos pasado- Dice Clove sintiendo lástima, por mí como si lo matan.
- Déjalo, al final volverá, no tiene ni idea de supervivencia- Respondo, a mi me da igual, es un bocazas.
- ¿Crees que me he pasado al darle?- Pregunta, a mi me ha parecido justo lo de pegarle. Me encojo de hombros, porque si respondo me pondré a insultarlo.
La observo con atención mientras intenta secarse el pelo; sus ojos de color miel aparentan ser dorados en la luz del sol, parece un ángel...
- Cato ¿Quieres dejar de mirarme como un tonto?- Vuelvo a la realidad. Mierda, se ha dado cuenta, encima me había quedado boquiabierto como un imbécil.
Paso el cilindro por la picadura; escuece lo suyo, maldito cacharro.
Se nota mucho la ausencia de Marvel,ahora todo es apacible y se puede vivir en armonía.
A la noche cenamos fruta, porque no pensamos cocinar ninguno de los dos ahora mismo.
Suena el himno y aparecen el fideo del 3 y el cojo del 10 en el cielo.
Un momento... Ya deberían haber entrevistado a nuestras familias, eso incluye a Greg. Seguro que se ha estado pavoneando delante de todos, que asco me da.
Clove bosteza y se queda dormida apoyando la cabeza sobre mi hombro y me pongo completamente rojo.
- Bu-Buenas no-Noches Clove- Digo sonrojado, pero ella ya está dormida, la paso el brazo sobre los hombros.
Dos menos, quedamos ocho.
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)