viernes, 28 de febrero de 2014

10-

CONTADO POR CLOVE:

"Al parecer Cato se ha creído lo de que ya no seguimos juntos, qué buena actriz soy.
El plan de Brutus de hacerle creer que hemos terminado para hacer una especie de "Show" sobre Cato llorando para que todo el Capitolio le vea haciendo el ridículo es un poco cruel, pero bueno, prefiero no llevarle la contraria. Solo espero que Cato no quiera abrirme la cabeza cuando se de cuenta de que es una mentira.
De repente oigo llorar a Cato desde el otro lado de la puerta, hago una mueca.
- Pobrecito.
Brutus alza una ceja incrédulo.
- No sientas pena por él, que se aguante.- Contesta.
Cato se pone a llorar más fuerte y hago otra mueca, veo que al final va a acabar deshidratándose de tanto llorar.
Brutus comienza a reírse a carcajadas y Enobaria se lleva la pala de su mano a su frente, como si estuviera diciendo que Brutus es tonto (Algo en lo que tiene razón).
Decido salir a dar una vuelta, porque el llanto de Cato me está empezando a estresar.
Llego a una cafetería llamada "Starbucks Capitol" (Un nombre un tanto raro) y pido un café y que en la taza ponga mi nombre. El camarero me da la taza con mi nombre mal escrito.
-Espero que le guste su café, "Clouf".- Dice, le fulmino con la mirada y salgo la cafetería.
Comienzo a caminar y doy un sorbo a mi taza; la verdad es que el café está muy rico. Llego de nuevo al hospital y me siento en una silla de la sala de espera a tomarme mi café.
Enobaria aparece al rato y se sienta en la silla de al lado, soltando un suspiro de desesperación.
-¿Qué pasa ?- Pregunto alzando una ceja.
-Que me va a explotar la cabeza por culpa del llanto de Cato.- Responde llevándose las manos a la frente.- Y la risa de Brutus también va a hacer que estalle.
Me río por lo bajo y termino de beberme mi café. Tiro la taza a la basura, porque no me apetece quedarme con una taza con mi nombre mal puesto.
Al rato decidimos ir con Brutus, y milagrosamente Cato ya no está llorando.
-Bueno,- Dice Brutus con una sonrisa maligna, da un poco de miedo.- Comencemos con la segunda parte del plan."

miércoles, 24 de julio de 2013

8-

El resto del día no fue muy bien, que digamos. Fuimos a nadar, y yo casi me ahogo un par de veces, Clove se estuvo burlando de mí el resto del día.
El día de hablar frente al Distrito 4 fue mucho peor, casi me matan cuando mencioné al niño del 4.
En el Distrito 3 fue horrible, prefiero no contar el porque.
Hoy vamos al Distrito 1 (Porque nos han hecho saltarnos nuestro Distrito para que sea el último en visitar) Tal vez no nos vaya tan mal como en los demás, o al menos eso espero.

Sunny se pone a pegar gritos por el vagón para que despertemos. Clove se despierta bostezando, increíble, no ha hecho falta despertarla. Se sienta en el borde de la cama, frotándose los ojos.
-Tengo sueño- Se queja ¿Cómo sabe que estoy despierto? Bueno, da igual.
Me siento a su lado y la rodeo con mis brazos. La doy un beso en la mejilla, ella suelta otro bostezo y se aparta perezosamente, estará medio dormida.
Salimos al comedor para desayunar, la verdad es que me muero de hambre.
Me tomo cinco magdalenas, Sunny me regaña diciendo que soy muy grosero por comer con la boca abierta, pues si la molesta que no mire. A Clove la hacen falta cuatro tazas de café para espabilarse del todo, pues sí que estaba cansada.
Brutus y Enobaria aparecen y se sientan junto a nosotros para desayunar.
-Como sabréis, esta es una de las ultimas paradas de la Gira de la Victoria- Dice mientras unta una tostada- Por favor, no hagáis el ridículo en este Distrito.
Hay que ver que poca confianza tiene en nosotros, ni que fueramos a quemar el Distrito.
Acabamos de desayunar y vamos a vestirnos. Me obligan a ponerme un traje negro que me sienta fatal, como todo lo que me hacen ponerme aquí.
Veo a Clove, que lleva un vestido azul marino que la sienta genial, bueno, a ella todo la sienta genial.
Salimos a las calles del Distrito, donde muchísima gente está reunida en una plaza. El Distrito es gigantesco, mucho más que el nuestro. Casi todos tienen joyas con piedras preciosas incrustadas, se nota que es el Distrito de los más ricos.
Entramos al edificio de Justicia, donde nos indican que nos debemos reunir con dos de los Vencedores del Distrito, Gloss y Cashmere (Tienen nombre de marcas de pintalabios, ahora que me doy cuenta) para presentarnos, aunque no sé que tiene de útil hablar con los Vencedores.
Llegamos a la sala, donde una Barbie (Supongo que es Cashmere, pero yo creo que es ota Barbie al igual que Glimmer) y un chico de pelo castaño nos esperan.
Nos sentamos frente a ellos. Brutus carraspea y mira a Cashmere y a Gloss.
-Chicos, estos son Clove y Cato, me voy para que podais hablar y conoceros- Dice y se marcha.
- Hola, me llamo Cashmere, encantada de conoceros- Nos saluda Cashmere, con una sonrisa coqueta, que va dirigida a mí. Para ser sincero, no es que me haga mucha ilusión que una tía a la que no conozco de nada me sonría, me gusta más que me sonría Clove, y no esa.
-Hola- Responde Clove secamente, que se ha dado cuenta de que me está sonriendo, un momento... ¿Está sintiendo celos? Imposible, sabe que no la cambiaría por nada en el mundo, o al menos creo que se lo he dicho.
Conversamos un rato con ellos. Cashmere no para de lanzarme miradas, hay que ver lo pesada que es.
- Bueno - Dice Gloss - ¿Cómo creéis que seran los Septuagésimo Quintos Juegos del Hambre? - La verdad es que no me lo había planteado.
Los del 25° aniversario consistían en que te elegían a tus vecinos para ir a los juegos. Sería deprimente que te tocara, sobre todo porque te sentirías traicionado.
Los del 50° aniversario fueron especiales porque fueron 2 chicos y 2 chicas de cada Distrito, es decir, el doble de tributos. Haymitch, el borracho del Distrito 12, fue quien gano ese año. He visto la grabación y parecía hasta peligroso.
Clove se encoje de hombros a modo de respuesta.
- Y dime, Clove- Dice Gloss mirándola con curiosidad, menos mal que no la ha echado una mirada seductora porque le mato- ¿Tienes novio?
- Puede que sí, o puede que no- Dice en tono arrogante mirándole con superioridad. ES MÍA, GLOSS, Y COMO LA MIRES MUCHO TE MATO.
- ¿Y tú, Cato? - Me pregunta Cashmere, dejando caer los párpados y hablando con voz seductora -¿Tienes novia?
Me pongo rojo al instante y miro a Clove, Cashmere sonrie con satisfacción por mi reacción.
No puedo decirla que Clove y yo somos novios, no porque no quiera, sino porque se lo prometí, y seguramente me dejará si lo digo.
- No - Intento que mi voz suene alta y clara, aunque sin mucho éxito.
- ¿Te gustaría tenerla? - dice mientras se mierde el labio inferior.
Puaj. Jamás se me ocurriría salir con esa chica. Me sacará unos cinco años (O más), y es una Barbie. Aún así intento no ser grosero.
- La verdad es que aun no estoy preparado - Miento - Por lo de la Arena, las pesadillas por la noche... No creo que sea buena idea salir con alguien.
- Pues cuando te recuperes - Dice Cashmere con voz sensual, que asco- Te estaré esperando.
Clove se levanta de la silla con expresión tranquila y sin decir nada, poniéndose frente a Cashmere.
El tortazo que ha dado a Cashmere ha sido tan fuerte que seguramente se la habrán caído un par de muelas.
- No lo creo- Dice Clove, respondiendo a lo que me ha dicho antes Cashmere.
Me quedo mirándola sorprendido mientras ella se sienta.
-Por cierto- Añade- No uses tanto maquillaje, no es sano para la piel- Dice, sacudiéndose las manos.
Cashmere se cubre la mejilla, pero no porque tiene la marca de un tortazo, sino porque tiene toda la mejilla llena de granos, que asco.
Me quedo mirando a Clove con los ojos abiertos como platos, mientras que ella observa a Cashmere con una mirada desafiante.
Casmere suelta un ruido raro por la garganta.
- ¿Es que no la vas a decir nada a tu amiguita, Cato?- Suelta Cashmere cabreada.
Vuelvo a mirar a Clove, que aprieta los puños, y seguramente si no digo algo no se va a cortar en pegarla otra vez, aunque me da igual, Brutus ha dicho que nos comportemos, y Clove no lo ha cumplido.
La paso un brazo alrededor de los hombros y la miro con expresión incrédula.
- ¿Qué?- Me suelta Clove bordemente.
- No me digas que estás celosa- Digo enarcando las cejas.
- Pues sí, estoy celosa ¿Algún problema?- Me espeta.
Suelto una carcajada, ella enarca las cejas. La rodeo con mis brazos y la atraigo hacia mí.
- Clove, no te cambiaría por nada del mundo, y menos por una barbie- La aseguro, mientras acorto la distancia que hay entre nosotros y besándola.
Me agarra de la cara con ambas manos y me responde al beso con delicadeza, jutando su frente con la mía.
- ¡Será... (Esta palabra no puede ser mostrada porque es demasiado grosera)- Grita Cashmere levantándose de golpe, dirigiéndose a Clove ¿CÓMO SE ATREVE ESA BARBIE A LLAMAR ASÍ A MI NOVIA? ¡¡LA MATO!!
Clove se aparta de mí y se levanta, poniéndose frente a Cashmere.
- Repítelo otra vez- Dice con voz amenazante.
Gloss las mira aturdido, con expresión de ''¿Qué hago yo aquí? ¡Socorro!''
- ¡¡He dicho que eres una (Palabra no apta)!!- Vuelve a gritarla.
Me da la sensación de que se va a derramar sangre como no venga alguien y las pare.
Bueno, sangre no, pero muelas sí.
Clove la da un tortazo el doble de fuerte a Cashmere. Cashmere intenta atacar, pero su forma de ataque es tan ridícula que Clove logra esquivar sus golpes con mucha facilidad.
Me levanto y abrazo a Clove por la espalda, fulminando a Cashmere con la mirada, porque llamar (Palabra no apta) a MÍ novia es para matarle de la peor forma posible.
- NI. LA. TOQUES. -Grito a Cashmere, abrazando a Clove con más fuerza.
Cashmere me mira incrédula.
- ¿Por qué? ¿Acaso es tu novia?- Pregunta con incredulidad.
Enarco una ceja.
- ¿Ahora te das cuenta? Se nota que eres rubia, no captas las cosas muy rápido- Dice Clove, bueno, yo también soy rubio, pero es un caso aparte.
Gloss se levanta y apoya una mano en el hombro de Cashmere, que parece que va a estallar, y no me apetece mancharme el traje con sangre. Sonrío a Clove, que me devuelve la sonrisa.
Gloss carraspea, le miramos.
- Bueno, lo mejor será que os vayáis, mañana os toca hablar en público- Dice- Adiós, chicos, encantado de haberon conocido.
Nos despedimos de Gloss (Porque no pensamos hablar a la loca de Cashmere) y nos vamos.
...
Cuando llegamos a la especie de ''suite'' que nos han asignado, nos encontramos a Brutus, a Enobaria y a Sunny cenando.
Nos sentamos y sirven estofado de cordero, que está delicioso. Lo triste es que no nos sirven postre.
Acabamos de comer, y Clove y yo decidimos irnos a dormir.
Ya llevaremos más de un mes saliendo juntos, y ya me ha dicho que no me hace falta preguntarla que si puedo dormir con ella, porque sí me deja.
Llegamos a su habitación. Clove se tumba en la cama y yo me tumbo a su lado mientras la rodeo con mis brazos. Me da un pequeño beso en los labios y se queda dormida.
- Buenas noches- Susurro, y me quedo dormido.

El día de hablar frente al Distrito 1 fue horrible. Clove y Cashmere casi se matan entre ellas, por no hablar del bochorno que hice cuando me tocó hablar de Marvel.
Por suerte hoy no vamos a hablar en público, ni tampoco tenemos que conocer a los Vencedores.
Porque nuestra penúltima parada es en el Capitolio.

domingo, 7 de julio de 2013

7-

-¡Oh Dios mío! ¡Oh Dios mío! ¡Vamos a ver a Finnick Odair! - Exclama Clove mientras da saltitos.
Es difícil de asimilar ver a Clove dando saltitos, es... raro.
-Uff si, ¡Qué suerte! -Digo con sarcasmo, espero que no se note mucho.
-No estarás celoso incluso antes de conocerle ¿Verdad? -Pregunta enarcando una ceja.
-¿Yo? ¿Celoso? ¿De Finnick Odair?- Pregunto- Vale, sí.
-Tranquilo Cato, no me gusta Finnick, a parte, es mucho más mayor que yo.
-Entonces ¿Por qué estas tan entusiasmada por ir a verle?
-Porque con solo 14 años mató a todos los tributos él solo, es... genial -Dice con los ojos brillantes por la emoción, maldito Finnick.
-Al parecer hemos llegado antes de lo previsto, por lo que tenéis el día libre- Dice Brutus.
Que bien que tengamos un día libre, porque desde hace más o menos una semana hemos estado ocupados con la Gira y no hemos podido descansar ni un solo segundo.
-Podríamos ir a la playa- Opina Clove, yo no se nadar, no asistí a las clases de natación cuando me tocaba porque me daba demasiada pereza ir porque estaba muy lejos de casa.
-Vale- Digo, no creo que sea tan complicado nadar.
Nos vamos a nuestras habitaciones para ponernos el bañador.
Como siempre, estoy horrible.
Salgo de la habitación y veo a Clove, uau, está guapísima, el bañador la sienta genial.
Brutus comienza a decirnos consejos, pero yo no le estos haciendo ni caso, estoy demasiado ocupado mirando lo bien que la sienta a Clove el bañador.
Después de la charla (No me he enterado de nada de lo que ha dicho Brutus) salimos a la playa.
En el camino veo unas flores muy bonitas, o al menos a mí me parecen bonitas. Arranco una flor y se la doy a Clove.
-Te agradezco el detalle, pero esto no son flores, son cabezas de cebolla- Dice Clove, mierda.
Me sonrojo, ella se ríe y me da un beso en la mejilla.
Llegamos a la playa, donde no hay casi nadie, seguramente todos estén durmiendo, afortunados... No han tenido que oír los gritos de Sunny a las nueve de la mañana por todo el tren.
Clove camina hasta la orilla y observa el mar, está tan guapa... CATO, VUELVE A LA REALIDAD DE UNA VEZ.
-¡Eh, Cato! ¿No vienes a bañarte?- Me dice, salgo de mi ensoñación y voy con ella, espero que no sea muy profunda el agua, no me apetece hundirme.
El agua por lo menos no está congelada, menos mal. Clove se lanza al agua y comienza a nadar, ojalá supiera nadar así.
De derpente, una ola viene hacia nosotros, y un chico de pelo color bronce y piel bronceada está surfeando sobre ella.
Es Finnick Odair.
Mi duda ahora mismo no es de qué hace aquí, sino ¿Cómo puede madrugar tanto? Yo ahora mismo me muero de sueño.
Viene surfeando hasta nosotros.
-¡Hey, chicos! Veo que vosotros también sois muy madrugadores- Dice Finnick. Yo no soy madrugador, me han obligado a levantarme.
Finnick se pone a hablar con Clove, que le sonríe, MALDITO FINNICK, YO TAMBIÉN EXISTO.
Al rato llega una chica pelirroja de inos veintitantos años. Finnick corre hacia ella.
-¡Annie!- Dice, mientras se abrazan.
Ah, ya se quién es; Annie Cresta, la chica que ganó los Juegos por saber nadar, si me hubiera tocado ir a mí ir ese año me hubiera ahogado el primero de todos.
De repente se ponen a besarse, por un lado bien, porque al menos sé que no me va a quitar a Clove, pero por otro lado es incómodo, porque no me apetece admirar esta escena.
Clove y yo nos miramos arqueando una ceja.
Annie y Finnick se giran, sonrientes.
-Annie, estos son Cato y Clove, los vencedores de este año- Nos presenta.
-Encantada- Dice con timidez.
Nos sentamos en la arena, mejor, porque nadar no estoy muy seguro de que vaya a saber.
Finnick y Annie no paran de mirarse y sonreírse, puag, son peores que los Trágicos Amantes, yo si le hago eso a Clove me pega una torta.
Clove y yo comenzamos a conversar sobre la Gira de la Victoria, que no ha sido exactamente increíble, sobre todo en el Distrito 11, donde me tocó hablar bien de Tresh, algo que me costó mucho hacer, porque si casi mata a mi novia con una roca muchos halagos no se merece, eso sí, se me ocurren unos preciosos insultos para describirle.
Clove apoya su cabeza en mi hombro, pienso que es una muestra de cariño, pero no, es que se está durmiendo. La paso un brazo alrededor de la cintura y dejo que descanse sobre mi hombro.
Finnick arquea las cejas y me lanza una mirada cómplice.
-Oh, vaya, vaya... Parece que no somos la única pareja ahora mismo, Annie- Dice Finnick.
Me sonrojo y miro a Clove, que mira a Finnick arqueando una ceja.
Finnick sonríe socarronamente y se acerca a Clove.
-Dime... ¿Tienes algún secreto que merezca mi tiempo?- Dice Finnick, con una mirada seductora, me entran ganas de darle una torta para que deje de mirar así a MI novia.
Clove se encoje de hombros.
-Secretos sí tengo, pero que merezcan tu tiempo no creo.
Finnick se vuelve a alejar de Clove, menos mal, ya me estaba cabreando.
-¿Y tú, Cato?- Pregunta.
Me quedo pensativo y luego niego con la cabeza, el único secreto que guardo es mi relación con Clove, los demás no se pueden considerar secretos.
Finnick y Annie se levantan, dados de la mano.
-Vamos a dar un paseo, ahora vendremos- Dicen, y se van.
Clove y yo nos miramos.
-Menos mal que se han ido, me estaban dando arcadas cada vez que se echaban esas miraditas- Dice, me río.
-Clove, si alguna vez hago alguna de esas cosas, por favor, pegame- Digo, ella se ríe y pasa sus brazos alrededor de mi cuello.
-No lo dudes- Dice y me besa, noto como me enrojezco como un tomate.
Oigo a alguien soltando un grito ahogado y corriendo hacia nosotros, pero intento ignorando y sigo besando a Clove.
-¡Já! ¡Os he pillado, enamorados!- Grita alguien, mierda, es Finnick. Clove y yo nos apartamos rápidamente- Ya sabía yo que había algo entre vosotros, pero tranquilos, Finnick sabe guardar bien los secretos, como el que le guardo al Presidente Snow...
-¿Qué?- Preguntamos Clove y yo al unísono.
-Em... Nada...- Dice intentando hacer que no tiene importancia, auque yo quiero saber de qué secreto habla- Bueno ¿Os venís con nosotros a dar un paseo?
-Vale- Respondemos, y vamos con ellos.

6-

El banquete es una larga mesa donde se encuentra la gente más importante del Distrito 12, incluidos los Vencedores.
Bueno, en total son solo seis personas; los tres Vencedores, el alcalde, su mujer y su hija.
Ya podrían haber invitado a algún amigo u otros familiares, al menos para que ocuparan la mitad de la mesa.
Josh la indica a Clove que se siente a su lado, maldito ¿Por qué todo el mundo tiene que ir a por Clove, es que no se dan cuenta de que es MÍ novia y no quiero que se acerquen a ella? Porque parece ser que no.
Clove acepta, y me dice que me siente con ella, menos mal que me lo ha dicho, no me gustaría quedarme solo, o peor; quedarme con Brutus y Enobaria.
Una mujer de pelo naranja chillón aparece y se sienta al lado de Sunny, que horror, otra del Capitolio.
-Ella es Effie Trinket-Nos presenta Josh ¿Effie? Menudos nombres tiene la gente.
Clove y Jennifer se ponen a charlar, bueno, al menos no habla con Josh. 
Nos sirven la comida, es una especie de cordero asado con una manzana en la boca. Tiene buena pinta.
Comienzo a charlar con Josh sobre qué tal vive en su Distrito, porque yo del mío no tengo nada que contar.
Acabamos de comer, ahora nos toca despedirnos, con lo poco que me gusta a mí hablar con la gente.
Clove estira la mano para despedirse de Josh, pero él la abraza y le da dos besos en las mejllas ¿¡CÓMO SE ATREVE EL JOSH ESE BESAR A MI NOVIA!? ¡LO MATO, LO MATO, LO MATO!
Por suerte, Clove no hace lo mismo.
Nos despedimos de todos ellos (Incluída la chica del Capitolio) y volvemos al tren.
He estado planeando mentalmente asesinar a Josh de una forma cruel y dolorosa, pero que pareciera un accidente, pero al final Clove me ha dado un abrazo y se me ha quitado el cabreo.
Josh debería agradecerle a Clove que le haya salvado la vida, pero como sea con algún que otro beso en la mejilla le arranco la cabeza.
-¿Sabéis?- Dice Brutus- Podríais escribiros cartas para la gira de cada Distrito para ya tenerlo todo preparado-Tengo que admitir que es una buena idea.
Suena un teléfono. Enobaria va a contestar.
-Cato, es para ti- Dice Enobaria tapando el micrófono ¿Alguien me está llamando? Increíble- Es un tal Greg- Eso lo explica todo.
Enobaria me pasa el teléfono.
-¿Diga?-Pregunto, aunque ya sé que es mi hermano.
-Hola, hermanito. Solo te llamo para que sepas que voy a celebrar una fiesta en casa- Responde.
-¡No!-Grito.
-No te he preguntado si me dejabas, te he avisado de que voy a hacer una fiesta en casa para que no te sorprendas cuando veas el estropicio- Comenta.
Antes de que pueda gritarle me cuelga.
Cato... No le mates, es tu hermano, ya te vengarás, inspira...
Cuelgo el teléfono y hago como si no fuera un tema importante lo de la discusión, puesto que me peleo con Greg casi a diario, es más, resulta raro que no nos peleemos.

Después de cenar todos nos vamos a dormir.
Clove me deja dormir con ella si no ronco, espero no roncar, no quiero que me vuelva a echar de la habitación.
Me tumbo al lado de Clove y la abrazo.
Ella pasa los brazos alrededor de mi cuello y me besa en los labios, y como siempre, me sonrojo.
La sigo el beso, rodeándola la cintura con mis brazos.
Sus labios son suaves y delicados, los míos dan asco, aparte de estar cortados son más secos que un desierto.
Nos besamos, besamos y besamos durante un largo rato.
Entre beso y beso cojo un poco de aire, porque no quiero acabar ahogándome.
Para mi sorpresa soy yo el que se aparta.
-Clove ¿Qué te parece Josh?- La pregunto.
Ella se queda pensativa un momento.
-Me cae bien, pero es demasiado empalagoso, está obsesionado con dar abrazos a la gente- Responde.
-Pensaba que... Que te gustaba-Digo, entrecortado.
Clove enarca las cejas.
-¿Otro ataque de celos?-Mierda, me ha descubierto- Pues no, no me gusta Josh, es demasiafldo mayor para mí- Es verdad, nos saca cuatro años- Y aparte, no sé si te has dado cuenta, pero él tiene novia.
No me había dado cuenta de eso, estaba demasiado ocupado teniendo celos de él.
-¿Ah, si?-Pregunto confuso.
-Pues sí, está saliendo con Jennifer, por si no lo sabías-Contesta.
-Yo pensaba que tú y Josh...
-Cato, ¿tú alguna vez no has estado celoso? Porque yo creo que no: Has estado celoso de tu hermano... De Josh... De un gato... Antes de Marvel... Yo creo que estas celoso incluso de la almohada- Vale, sí, soy un poco celoso, pero de la almohada no estoy celosLA ALMOHADA LE ESTÁ TOCANDO EL PELO A CLOVE ¡MALDITA ALMOHADA!
-Bueno... Puede que sea un poco celoso- Digo.
Clove se ríe por lo bajo y me da otro beso.
-Bueno, buenas noches-Dice entre un bostezo y apoya su cabeza en mi hombro.
-Bu-Buenas noches-Tartamudeo.
Me quedo dormido.

La Gira no fue muy bien, que digamos.
En el Distrito 11 hubo un lío con la familia de Tresh.
En el Distrito 10, 9, 8, 7, 6 y 5... Bueno... Yo hice el ridículo, aunque tuviera unas cartas de apuntes.
Y todos los vencedores intentando ligar con Clove,de milagro que no les he arrancado la cabeza.
Lo único interesante han sido mis besos con Clove, pero es mi intimidad y no lo pienso describir.
Ahora hemos llegado a una de nuestras últimas paradas, donde el sex-symbol Finnick Odair resalta entre todos los vencedores.
Hemos llegado al Distrito 4.

domingo, 30 de junio de 2013

5-

Tengo un sueño de lo más extraño:
Una especie de muto entre león, lobo, cocodrilo y no se qué animal me está atacando, pegando chillidos como un loco.
No noto nada de dolor, y sé que estoy soñando, es algo un tanto extraño que me suceda, nunca suelo ser consciente de esto.
El animal sigue gritando, pero ahora comprendo lo que está diciendo, algo como ''¡Sufrirás por lo que hiciste en manos de quien merece vengarse!'' Ni idea de por qué grita eso, ni que yo me hubiera comido su almuerzo.
De repente los gritos cesan, y el muto (Supongo que será eso) desaparece.

-¡A levantarse, hoy es un día muy muy importante!
Me despierto, obviamente los gritos a estas horas son de Sunny, reconocería su voz aguda en cualquier parte.
Clove sigue dormida en mis brazos, está tan guapa  cuando duerme... Vale, creo que me he golpeado en la cabeza mientras dormía.
Aunque no quiera despertarla, no tengo más remedio, porque sino Sunny nos gritará.
-Clove- La susurro. Sacudo su hombro ligeramente- Despierta.
-Hmm...- Murmura, y se gira para no oírme.
-Clove, tenemos que levantarnos ya, hoy tenemos que conversar ante el Distrito 12- Murmuro.
-Cinco minutos más...- Pide, y hunde la cara en la almohada.
La verdad es que yo también quiero dormir un rato más, pero no tengo más remedio que levantarme.
-Bueno, yo me levanto ya- Digo levantándome, esperando a que Clove me siga.
-Pues vale- Dice, con la cabeza pegada a la almohada.
Suspiro, nada va a hacer que se levante.
Me acerco a donde ella duerme, y antes de que pueda replicar la cojo en brazos y la saco de la cama, y Clove no es muy ligera que digamos, pesa lo suyo.
-¡Eh! ¡Bájame ahora mismo!- Me grita, comenzando a darme golpes en los brazos, ay.
La saco de la habitación soportando las patadas que me está dando.
La bajo al suelo y ella suelta un bufido.
Antes de que pudiera chillarme Brutus, Enobaria y Sunny aparecen.
-¿Que eran esos gritos?- Pregunta Brutus.
- Que éste me ha despertado y me ha sacado a rastras de la habitación- Dice señalándome, dicho de esa forma suena peor.
Sunny se cruza de brazos.
-Esos modales señorito, no se puede despertar de esas formas a una dama- ¿Clove?¿Una dama? Clove tiene de dama lo que yo de guapo; nada. Se comporta más bien como lo suele hacer un chico, aunque según Sunny aparente ser una ''Dama''.
-Eso, Cato, no puedes tratar así a una dama- Dice Clove imitando el acento de Sunny.
Sunny, Enobaria y Brutus se van, y me dejan a solas con Clove.
Antes de eso Brutus me ha guiñado el ojo con una sonrisa cómplice, no me gusta que Brutus haga eso, me hace sentir incómodo.
-Lo siento, no debería haberte despertado de esa forma- Me disculpo.
Clove me da un beso en la mejilla, y noto otra vez las mariposas en el estómago, y esta vez sé que no son de hambre.
-Me tendré que creer tu disculpa, pero no te acostumbres- Dice, la sonrío.
Brutus aparece y se acerca a nosotros.
-Bueno chicos ¿Estáis listos? - Nos pregunta.
-¡Pero si todavía estamos en pijama y ni siquiera hemos desayunado!- Exclamo, indignado.
Clove asiente con la cabeza en señal de estar de acuerdo conmigo.
- ¡Pues daos prisa, no tenemos todo el día! - Grita.
Corremos hacia la cocina donde están Sunny y Enobaria.
Engullo lo primero que veo, pues tengo prisa y se que la comida del Capitolio esta toda riquísima.
Veo como Clove me mira con cara de asco cuando me meto en la boca dos magdalenas.
Después de estar a punto de morir repetidas veces por atragantarme con un trozo de comida corro a mi habitación y me pongo el traje de ayer.
Me reúno con los demás en la puerta.
¡Uau! ¡Clove está magnífica! La han sustituido el vestido rojo sin tirantes por un vestido sencillo de color azul.
Tiene un lazo a la altura de la cintura, y el vestido acaba en las rodillas. La queda genial.
Lleva el pelo suelto y unos zapatos de tacón de aguja que tienen aspecto de ser incomodísimos. Menos mal que soy un chico, aunque mis zapatos no es que sean lo que se dice ''Cómodos''
- Cato ¿Por qué me estás mirando? -Pregunta Clove enarcando las cejas.
- Pues... Porque... Yo... Emm... - Empiezo. No puedo decirle a Clove que esta preciosa, se lo tomaría como una burla, odia los vestidos, y sobre todo los cumplidos- Estas preciosa. ¡MIERDA! CEREBRO, ¿POR QUÉ NARICES HACES ESO? Espera... ¿Yo tengo cerebro? ¿He estado hablando solo todo este tiempo? Esto reafirmaría la frase ''Eres tonto'' porque si hablo solo...
- Gracias - Dice Clove, alisándose la falda con ademán nervioso- Es mucho mas cómodo que el anterior.
- Se nota -Digo sonriendo. Ella me devuelve la sonrisa.
- Siento interrumpir la charla de los tortolitos, pero tenemos que irnos ya- Dice Brutus con una mirada claramente cruel.
No sé que ha podido ver Enobaria en el.
- ¿¡Que has dicho?! -Chilla Brutus rojo de rabia.
Tardo un rato en darme cuenta de que va dirijido a mí, y otro en que he hablado en alto.
- Na-Nada -Digo entrecortado.
- Fuera de aquí antes de que me replantee la idea de matarte.
Salgo por la puerta el primero, no hace falta que lo diga otra vez, conozco lo suficiente a Brutus como para saber que nunca se hecha faroles.

En seguida me arrepiento de haber salido.
Todo el Distrito 12 se me ha quedado mirando.
Me pongo rojo y noto una mano en mi hombro. Es Clove, que mira al público con nerviosismo.
- Emm... Si... -Dice el alcalde del Distrito dando golpes al micrófono para comprobar que funcione- ¡Bienvenidos, vencedores! - Aplaude él, solo él. Todos los demás nos miran con cara de asco. Entiendo que me miren así a mi, pero a Clove...
-Vamos a oír unas palabras de los ganadores de los Juegos. Adelante, hablad.
Clove es la primera en salir a hablar.
Carraspea un poco y el Distrito entero se le queda mirando fijamente.
-Siento lo que hice- Comienza a decir. Nadie responde- Tenía miedo de perder, porque sabía que si perdí a moriría. Ni siquiera sé por qué maté a Katniss, ella no tenía la culpa de estar allí, simplemente fue voluntaria para salvar a su hermana, algo que resulta un acto de valentía en este Distrito.
Su discurso continúa, y no voy a describirlo porque hay partes demasiado deprimentes.
-Lo siento- Termina el discurso, sollozando.
Me acerco a ella y la abrazo, me da igual que me este viendo todo el Distrito 12, que se aguanten y no miren si no quieren, Clove no se merece sufrir por dos niños enamorados.
Entonces un chico (Que no había parado de mirar a Clove embobado, algo que ha hecho que me cabree) alza su mano.
-Te perdono- Dice.
Otro grupo alza sus manos.
-Y nosotros.
Así hasta que todos tienen las manos alzadas.
Clove les sonríe ¿Por que les sonríe a ellos y no a mí? ¿QUE TIENE EL DISTRITO 12 QUE NO TENGA YO? MALDITO DISTRITO.
El tiempo de los discursos se termina sin haber hablado yo, que poco considerado por su parte.
Bueno, por lo menos han perdonado a Clove.
Los habitantes del Distrito se dispersan. Algunos se van a sus casas y otros no sé hacia dónde van.
Entramos en el Edificio de Justicia.
-Ha estado muy bien tu discurso- Felicitan Brutus y Enobaria a Clove.
Ella reprime una triste sonrisa, la vuelvo a abrazar y ella apoya la cabeza en mi hombro.
No sé si alguna vez lo he mencionado, pero Clove es mucho más baja que yo. No es que sea pequeña (Supera el metro ochenta) pero al ser yo tan alto (Mido dos metros y algo) me llega a la altura de la barbilla, y ahora que lleva los tacones casi me alcanza.
-Dejad los cariños para otro momento- Dice Brutus-Ahora vamos al banquete ceremonial.

lunes, 24 de junio de 2013

4.

-Ah, y el es Haymitch- Dice el alcalde, se les había olvidado por completo presentarlo.
-Hola- Saluda, arrugo la nariz; le apesta el aliento a alcohol- Me levantaría para saludaros, pero como veréis no estoy en condiciones- Continúa recostándose en el sillón.
-Esta borracho -La susurro a Clove
- ¡No me digas! -Dice sarcásticamente.
Es difícil de creer que Clove sea sarcástica cuando esta tan guapa. ¡CEREBRO ESTÚPIDO! ¡No tiene nada que ver que Clove este guapa para que sea sarcástica! ¿Me estoy volviendo loco? No, siempre he estado loco, he llegado a esa conclusión.
Jennifer me recuerda en algo a Katniss, espero que no sean familiares, no quiero que me maten en plena Gira de la Victoria.
Nos ponemos a charlar, bueno, más bien Clove comienza a charlar con ellos, yo solo me limito a asentir y mirar de reojo a Clove.
-Bueno- Dice el alcalde levantándose del asiento- Mañana tendréis que hablar ante todo el Distrito 12, espero que no os pongáis nerviosos- ¿¡QUÉ!? ¡No nos han avisado sobre eso! ¿Qué les digo, que le arranqué el corazón a Peeta porque lo quería? No, me niego rotundamente.
Clove tiene la misma cara de sorpresa que yo.
Puede que yo matara al Chico Amoroso arrancándole el corazón, pero Clove mató a la Chica en Llamas cortándola en cachitos. Creo que vamos a tener ciertos problemas en este Distrito.
Nos despedimos de ellos y nos dirigimos de nuevo al tren, seguido por las miradas de personas con aspecto moribundo, me siento un tanto incómodo.

Nos llevan a una sala de otro edificio, donde están Brutus y Enobaria, esperándonos.
¿Ahora qué nos van ha decir? No hemos hecho nada malo.
-¿Sabéis que mañana tendréis que hablar delante del Distrito..?- Empieza Enobaria.
- ¡¿Que si lo sabemos?! - Grita Clove irritada - ¡Si! ¡Sabemos que mañana nos tocará hablar delante de todo el Distrito 12!
- Y por cierto -Añado, ya rojo de rabia - Gracias por decírnoslo.
Tampoco nos han dicho algo tan malo, pero me fastidia que no nos lo hubieran dicho antes.
- Chicos, chicos, chicos… - Dice Brutus en tono apaciguador - tranquilizaos, mañana no os pasara nada, así que lo mejor es irse a dormir y descansar para mañana.
Me adelanto y hecho a andar hacia mi habitación, pero algo me detiene.
- He dicho que a dormir y descansar -Dice Brutus mientras me fulmina con la mirada. En su mano derecha tiene la parte trasera de mi camiseta hecha una bola en su puño.
- ¿Y a donde te crees que iba? -Le espeto.
- Creo que no me he expresado bien -Aclara Brutus - HOY NO VAIS A DORMIR EN EL TREN.
-Vale, vale, ya me he enterado- Digo alzando las palmas de las manos- ¿Entonces, dónde dormimos?
-Ahora nos llevarán hacia allí, así que hazme un favor y espera-Contesta.
Suelto un bufido y me siento en una silla a esperar, no tengo más remedio que hacerlo, aunque mi paciencia sea mínima.
Al rato llega un Agente de la Paz, que nos guía por el edificio hasta un lujoso apartamento en la décima planta (Ya podrían haberlo puesto en otra planta).
Para ser un Distrito pobre se han montado la casa bastante bien.
-Bueno, hasta mañana- Se despide Brutus, bostezando.
Entro a mi habitación, que es poco distinta a la del tren.
Decido darme una ducha para despejarme las ideas.
Después de bañarme me pongo el pijama y me tumbo en la cama. No la he preguntado a Clove que si podía dormir con ella, bueno, con los ronquidos que doy no me iba a dejar, estoy seguro.
Cierro los ojos y me quedo dormido enseguida.

Me despierto porque alguien está llamando a la puerta.
Para mi sorpresa es Clove, que tiene los ojos enrojecidos, como si hubiera estado llorando.
-¿Qué te pasa?-Digo preocupado.
-No es nada...-Responde frotándose los ojos- ¿Puedo... Dormir contigo?
Noto que me he puesto rojo, menos mal que está oscuro y apenas se me ve.
-Cla-Claro, pasa- Digo, dejándola pasar.
Clove entra y yo paso tras ella.
Se recuesta en mi cama y me tumbo a su lado.
De repente se echa a llorar.
Imagínate ver a la persona a la que más quieres en el mundo llorando. Ahora piensa en cómo te sentirías. Pues bien, así me siento yo ahora mismo, o tal vez mucho peor, me siento tan mal que me pegaría un tiro si tuviera alguna pistola a mano.
La abrazo, y noto un millón de mariposas en el estómago, o tal vez es que tengo hambre.
-Tranquila, no pasa nada- Intento tranquilizarla, acariciándola el cabello.
-Cato...-Susurra.
-¿Si?-La pregunto, en tono dulce.
-No toques mi pelo-Dice, acurrucándose más a mi lado, no puedo evitar sonreír.
-Esa es mi chica- Murmuro esperando que lo oiga, pero ya se ha quedado dormida.

sábado, 15 de junio de 2013

3-

Noto que alguien acaba de golpearme el hombro con mucha fuerza.
Me levanto de golpe; Clove me mira con el ceño fruncido, cruzándose de brazos.
-¿Qué pasa?- Pregunto.
-¿¡Que qué pasa!? ¡No me dejas dormir con tus malditos ronquidos!- Me grita.
-Pero si yo no ronco...- Digo.
-Fuera de mi habitación- Me ordena señalando la puerta.
-Pero....
-¡Fuera!
Salgo de su habitación tristemente, y en el pasillo veo la cosa más asquerosa que puedes imaginar.
Brutus y Enobaria se están dando el lote en mitad del pasillo.
Me reprimo la ganas de gritar y entro de nuevo a toda prisa a la habitación de Clove.
-¿¡Qué haces!? ¡Te he dicho que fuera!- Vuelve a gritarme.
-Es que... En el pasillo... Brutus y Enobaria... Están...- Intento explicarla.
-Sí, claro, que me lo voy a creer- Dice en tono sarcástico.
-Es verdad... Están ahí afuera...- La digo.
-Voy a ver si es cierto- Clove se levanta y se dirige a la puerta.
Mueve el pomo de la puerta y se asoma por la puerta.
Se queda paralizada al verlos y se tapa la boca sorprendida.
-Te lo dije- La susurro y vuelve a cerrar la puerta.
-Está bien, puedes quedarte- Dice al fin- Pero no quiero oírte roncar, así que tápate la cabeza con la almohada o haz algo para que no te oiga.
-¿Y si me ahogo?- La pregunto.
-Pues ahogate en silencio.
Me tumbo a su lado y me lanza una almohada a la cabeza.
-Al menos podrías darne un beso de buenas noches- Digo, espero que capte la indirecta.
-Cállate- Me espeta, no parece estar de buen humor.
Nota mental; No roncar si duermo con Clove.
Me tapo la cara con la almohada, a ver si no despierto a Clove esta vez, no me apetece que me vuelva a echar de su habitación para encontrarme con el espectáculo de Brutus y Enobaria en el pasillo.

No he podido dormir en toda la noche porque no podía respirar con la almohada en la cabeza (Con la que he tenido una larga charla) y por los ruidos tan extraños que sonaban en la habitación de Brutus y Enobaria.
Me he pasado casi toda la noche mirando cómo dormía Clove. Mucha gente diría que es muy romántico y todo eso, pero yo me he sentido como un acosador.
-¡A levantarse, chicos!-Grita alguien con voz cantarina, lo que faltaba, ahora Sunny nos quiere despertar a todos. Se oyen los taconazos desde aquí.
-Brutus, Enobaria, a despert¡AH!- Chilla, Clove se despierta, clavándome el codo en las costillas, ay.
-¿Qué ha sido eso?-Pregunta, frotándose los ojos medio dormida.
Nos levantamos y salimos a donde está Sunny, que mira atónita la habitación de Brutus y Enobaria.
Clove y yo también nos sorprendemos a verlo (No quieran saber lo que estaba pasando).
Me acabo de traumatizar completamente.
Clove y yo nos giramos, no nos apetece ver esa escena tan desagradable.
Sunny cierra la puerta y dice que nos marchemos al otro vagón, pero eso no hacía falta pedirlo, ya teníamos en mente el irnos.
El desayuno está servido en una mesa del comedor, pero ninguno de los dos tenemos apetito, con lo que acabamos de ver se te quitan las ganas de comer algo por miedo a vomitarlo.
Aún así nos sentamos en la mesa, mirando la comida en silencio; ambos estamos traumados.
Al rato aparece Brutus, que solo lleva un albornoz blanco.
-Que bien he dormido hoy- Comenta, yo creo que dormir poco ha dormido, por no decir que no ha dormido nada.
-¿Dormir? ¿A eso lo llamas tu dormir? -Dice Clove
-Sí, solo hemos dormido -Responde Brutus - Además, vosotros también habéis dormido juntos.
-¿Como lo sabes..?- Pregunto.
- Pues... Porque.... - empieza a explicar Brutus - entramos en tu cuarto anoche.
¡¿QUÉ?! ¡BRUTUS Y ENOBARIA HICIERON ''ESO'' EN MI HABITACIÓN! Que asco.
- ¡Eh! Que nosotros solo dormimos - Cambio de tema, no quiero traumarme más.
- Dormir habrás dormido tú-Me reprocha Clove- Porque con lo que roncas no hay quien pegue ojo.
Enobaria aparece al poco rato, también con bata.
-Que bien he dormido hoy- Comenta ahora ella, menuda mentira mas grande.
De repente, Sunny da un golpetazo a la mesa y comienza a gritar a Brutus y Enobaria sobre lo que han hecho.
Clove y yo nos miramos sorprendidos oyendo la bronca que les está echando, que incluye palabras que no pienso describir.
-Increible, una mujer del Capitolio echándoles la bronca a dos Vencedores del Distrito 2- Dice Clove en un susurro, río por lo bajo.
-¿Qué pensáis vosotros del comportamiento de Brutus y Enobaria?- Nos pregunta Sunny señalándolos.
No tenemos ni idea de qué responder, nunca he hecho nada de eso ni pienso hacerlo, es asqueroso.
-Pues... Que es malo- Respondo, ni idea de si es bueno o malo, pero desagradable sí.
El tren da un frenazo tan fuerte que casi se me cae la taza de café sobre mí.
-Ya hemos llegado al Distrito 12- Dice Sunny. Preparaos para salir.
Sí, debería cambiarme, salir en pijama para que me vea Panem entera.
Pero ahora mismo a mi habitación mejor no entrar, no quiero ni saber cómo la han dejado.
Por suerte dejé la ropa de ayer en la habitación de Clove, así que puedo cambiarme.
Me visto y nos llevan a Clove y a mí hacia la salida del tren, donde la gente nos mira en silencio, esta parada va a ser muy incómoda, hemos matado a los Amantes Trágicos y ahora todos nos odian.
Salimos en dirección al Edificio de Justicia, seguidos por millones de miradas.
Al llegar, el alcalde nos espera sentado en el sillón, junto a tres personas: Un chico de pelo castaño, una chica rubia y un señor rubio que parece estar borracho; los Vencedores del Distrito 12, nada más y nada menos.
Les saludamos.
-Yo soy Josh, y ella es Jennifer- Dice el chico moreno señalando a su compañera, aunque ya sabía como se llamaban.
-Yo soy Clove, y él es Cato- Nos presenta.
-Encantado de conoceros- Responde Josh con una sonrisa dirigida a Clove, espero que no se interese por ella.
Clove le devuelve la sonrisa, creo que a Clove sí le gusta, y eso me hace cabrearme con ese maldito Josh.